Este jueves, 3 de septiembre, han comenzado ya las medidas restrictivas en Salamanca y Valladolid anunciadas por la Junta de Castilla y León este pasado martes ante la subida de contagios en ambas ciudades en las dos últimas semanas.
En concreto, se trata de medidas "prácticamente de fase uno" como reconoció el vicepresidente, Francisco Igea, aunque no habrá horarios para poder salir de casa ni se limitará la movilidad.
Estas medidas, además, entrarán en Valladolid también tras dos días de tensas declaraciones entre el propio Igea y el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, sobre la idoneidad de las mismas. No en vano, pese a que el Juzgado ya ha ratificado las medidas, el primer edil llamaba la atención de que el procedimiento de impugnación de las medidas iniciado por el Ayuntamiento no se corresponde con este sino que ha recaído en la Sala de lo Contencioso.
Lejos de polémicas, lo cierto es que desde este jueves las medidas ya son efectivas y desde la Junta confían en que sean válidas para cortar la cadena de transmisión del coronavirus.
Se trata de medidas restrictivas de aforo en velatorios, ceremonias, establecimientos de restauracón, terrazas, cines, o instalaciones deportivas. Eso sí, no se aplican dos de las medidas más restrictivas de la fase 1 como la limitación de movilidad y la aplicación de franjas horarias para las salidas del domicilio.
El vicepresidente ha señalado que, en principio, no afectará al inicio del curso, pero se valorará la incidencia. Asimismo, la consejera de Sanidad, Verónica Casado, ha informado de que se revisará cada semana el paquete de medidas restrictivas, teniendo en cuenta que el periodo de contagio es de 14 días.