La Consejería de Sanidad quiere fijar tres niveles de alerta con restricciones antes de llegar a "límites terribles" de incidencia y crecimiento de contagios por COVID-19.
En concreto, estos niveles serían el 1, 2 y 3 y tendrían aparejados medidas restrictivas en cada uno de ellos en función de la situación epidemiológica. En todo caso, el confinamiento sería la "última medida".
De hecho, este departamento ya cuenta con un trabajo elaborado, que podría aplicar si no se llega a un consenso nacional, y que se basa en fijar estándares y umbrales que sirvan para adoptar medidas que permitan frenar la expansión del virus en Castilla y León.
Así lo indicó la consejera Verónica Casado, que explicó que llevará esta propuesta al Comité de Expertos autonómico frente al COVID-19 esta tarde, con el fin de que valoren su aplicación y se pronuncien sobre su puesta en marcha.
No obstante, confió que haya un consenso de todas las comunidades autónomas, para que las medidas restrictivas sean comunes, algo en lo que trabaja precisamente la Ponencia de Alertas del Ministerio.