Los efectos de la segunda ola de la pandemia por el COVID-19 son claros y dejan en Castilla y León desde el pasado 1 de septiembre un total de 508 fallecidos por esta causa. Este dato supone el 10,8 por ciento del total de víctimas por el coronavirus en la Comunidad, que en estos momentos asciende a 5.402. La Junta tilda este dato de “significativo” y asegura que la tendencia continúa “en fase ascendente”, según recoge en la resolución publicada hoy en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) en la que recoge la aplicación del toque de queda a partir de esta noche.
De los 5.402 personas fallecidas en la Comunidad por el virus, 2.670 se contabilizan en los hospitales de Castilla y León, 1.772 eran usuarios de residencias y 960 murieron en sus domicilios, según datos del Portal del Gobierno Abierto de la Junta.
Por provincias, la más castigada es la provincia de León, con 971 víctimas por COVID-19 desde el 1 de marzo. Le siguen de cerca las provincias de Salamanca, con 966 fallecidos; o Valladolid, con 902. Segovia es la cuarta provincia más afectada, con 668 fallecidos; se contabilizan 609 en la provincia de Burgos; 454 en la de Ávila; 338en el caso de Soria; 259 fallecidos en la provincia de Zamora; y 235 en la de Palencia.
Por sexos, la incidencia es muy parecida, ya que hasta el momento son 2.679 las mujeres fallecidas por COVID-19 frente a los 2.723 hombres (44 más). Por franjas de edad, la mayor incidencia de la mortalidad recae en los mayores de 80 años, con 4.137 fallecidos, es decir, el 76,6 por ciento del total de las víctimas. En esta franja de edad, la mayor incidencia se da en las mujeres, con 2.285 fallecidas frente a los 1.852 hombres.
En franjas de edades inferiores, sin embargo, la tendencia es la contraria y el COVID-19 ha afectado a mayor número de hombres que de mujeres. Entre los 70 y 79 años han fallecido 798 personas (546 hombres y 252 mujeres). Entre los 60 y 69 años, las víctimas ascienden a 297 personas, con 221 hombres y 76 mujeres fallecidos; y entre 50 y 59 años, las víctimas ascienden a 119 (75 hombres y 44 mujeres).
La mortalidad se reduce de forma importante en el resto de franjas de edad. Entre los 40 y 49 años han fallecido 38 personas (21 hombres y 17 mujeres); se contabilizan siete víctimas de entre 30 y 39 años (cinco hombres y dos mujeres); cuatro decesos de personas de entre 20 y 29 años (dos hombres y dos mujeres) y dos víctimas más de entre 10 y 19 años (un hombre y una mujer).