El sindicato de Enfermería (Satse) ha avisado de que 2021 seguirá siendo un año "especialmente duro y difícil" para las enfermeras y fisioterapeutas al tener que seguir enfrentándose a la COVID-19, por lo que ha exigido a todas las administraciones competentes que refuercen las plantillas, mejoren sus condiciones laborales y propicien entornos laborales "más seguros" de cara a poder atender y cuidar a los pacientes y a la ciudadanía con "mayor calidad y seguridad".
Tras un año de "grave crisis y colapso sanitario" a consecuencia de la expansión de la COVID-19, Satse ha avisado de que el comienzo de la vacunación no debe llevar en modo alguno a considerar que la lucha contra esta grave enfermedad está ganada y, por tanto, "volver a dejar de lado las numerosas necesidades" que tiene el sistema sanitario para garantizar una atención segura y de calidad tanto a los pacientes Covid-19 como a los que sufren cualquier otra enfermedad o problema de salud.
Por ello, y de cara al nuevo año, la organización sindical ha informado de que va a intensificar sus acciones reivindicativas para lograr que todos los servicios de salud cuenten con el número suficiente y adecuado de enfermeras, como así se han comprometido los partidos políticos en la Comisión para la Reconstrucción Social y Económica de nuestro país.
Para ello, y además de esperar en próximos meses la posible aprobación de la Ley de Seguridad del Paciente impulsada por Satse, una vez que ya ha sido tomada en consideración en el Pleno de la Cámara, el sindicato ha insistido en la necesidad de poner en marcha un 'Plan de Retorno y Estabilidad' para estos profesionales, así como un aumento progresivo de las plazas universitarias de los estudios de Grado de Enfermería.
Asimismo, el sindicato ha señalado que es "absolutamente imprescindible" mejorar las condiciones laborales de un colectivo profesional que tiene una elevada tasa de temporalidad y precariedad y plasmar el reconocimiento que se merecen en la recuperación de derechos laborales perdidos en los años de crisis y aún pendientes, como la jornada semanal de 35 horas o un justo aumento de sus salarios.
De otro lado, la organización sindical ha pedido medidas "eficaces, conjuntas y coordinadas" en toda España para propiciar entornos laborales "seguros" y evitar así los riesgos de todo tipo que sufren en su actividad diaria, entre ellos las agresiones físicas y verbales por parte de pacientes y familiares.
La incorporación de las enfermeras en otros ámbitos que no son los asistenciales, como son los centros escolares, es otra de las demandas que Satse va a seguir pidiendo para que haya una enfermera, al menos, en cada colegio o instituto de España para que puedan atender, cuidar, formar y educar en salud a niños y jóvenes.
Por ello, Satse ha confiado en que se propicie el avance y desarrollo ya iniciado en varias comunidades autónomas y que 2021 sea el año de la consolidación de esta "justa y necesaria" demanda en todos los centros escolares.
Finalmente, la organización ha esperado que en 2021 se culminen todos los protocolos y guías prácticas necesarias para que las enfermeras puedan indicar, usar y autorizar la dispensación de medicamentos, como así establece el Real Decreto de prescripción enfermera, y que todas las autonomías ya las hayan acreditado para hacerlo, al igual que confía en que se realice la prueba de la evaluación de la competencia de la especialidad de Enfermería Familiar y Comunitaria en el menor tiempo posible tras años de espera.
"Es urgente propiciar el traspaso de la sanidad penitenciaria a las comunidades autónomas para así mejorar las condiciones de las enfermeras que atienden a las personas privadas de libertad y que el Ministerio de Sanidad cree un Observatorio de la Imagen de la Mujer en sanidad para acabar con los estereotipos sexistas y de todo tipo que todavía atentan contra su dignidad personal y profesional", ha zanjado.