La consejera de Sanidad, Verónica Casado, ha defendido hoy las medidas restrictivas impuestas tras la Navidad por la Junta de Castilla y León, tales como cierre del interior de la hostelería, centros comerciales, gimnasios, reducción de aforos en lugares de culto y, una de las más controvertidas, el adelanto del toque de queda de las 22 a las 20 horas. Tanto que el Gobierno de España ha recurrido la medida ante el Tribunal Supremo.
Según ha explicado Casado, el índice de reproducción del virus, es decir, la capacidad de contagio que tiene cada persona infectada, "afortunadamente ya lleva varios días por debajo de 1, y en Castilla y León estamos en 0,85". A juicio de la consejera, "es evidente que las medidas impuestas hace 14 días, como el adelanto del toque de queda, están ya mostrando su efecto en la contagiosidad". De igual forma, ha subrayado que otro elemento importante es la disminución de los brotes de origen social también durante estos días.