La Junta de Castilla y León ha realizado hasta la fecha más de 220.000 test de antígenos que han permitido detectar a 2.518 casos positivos asintomáticos, una estrategia que permite "aislar estos casos, rastrear a sus contactos y cortar la transmisión", tal y como ha explicado la consejera de Sanidad, Verónica Casado, quien ha anunciado nuevos cribados en más de una treintena de municipios.
Casado, en la rueda de prensa semanal que ofrece para dar cuenta de la evolución de la pandemia del Covid-19, y que ha estado acompañada por el coordinador regional de las UCIs, el doctor Jesús Blanco Varela, ha aseverado que se han realizado test de antígenos a casi el 10 por ciento de la población de la Comunidad y se harán en los próximos días en más de una treintena de poblaciones de las nueve provincias.
Estos cribados se llevan a cabo en los municipios que presentan una alta incidencia acumulada y una tendencia "al alza" y cuando se considera que hay transmisión comunitaria, por lo que además de realizarse en los 53 municipios que cuenta con "medidas excepcionalísimas" aprobadas el pasado sábado por la Junta, se sumarán otros con una tendencia creciente.
En Ávila se está estudiando los municipios en los que se realizarán estos cribados; en Burgos, se realizarán en Huerta del Rey, Teviño, Aranda de Duero, Santo Domingo de Silos y la ZBA de Comuneros; en León, en Bembibre, Cimanes de la Vega, Quintana, Congosto, Santa Colomba de Somoza, Val de San Lorenzo y Villaquejida y en Palencia, en Becerril de Campos, Tariego y Villaherreros.
Igualmente, en la provincia de Salamanca se harán test poblacionales en Béjar, Santibañez de Béjar, Alba de Tormes, Encinas de Arriba, Pedrosillo de los Aires, Valdecarros e Ituero de Azaba; en Segovia, en El Esponar; en Soria, en Quitana Redonda; en Valladolid, en Ataquines, Villagarcía de Campos e Íscar y en Zamora, en Barcial del Barco, Castrillo de la Guareña, Cubo de la Tierra del Vino, Faramontanos de Tábara y Rabanales.
Al respecto, Verónica Casado ha defendido la estrategia que sigue la Comunidad para detectar casos asintomáticos, a través de estos test masivos, porque se busca "romper la cadena de transmisión" lo que ha llevado a Castilla y León a ser la primera comunidad en pruebas por habitante, con una tasa de 7.858 pruebas por cada 100.000 habitantes, frente a la media nacional que es de 3.737.
Esta estrategia "está funcionando", junto con las otras medidas restrictivas que se están aplicando en la Comunidad y está provocando "un impacto sobre el control de la incidencia", ha aseverado Casado, quien, no obstante, ha precisado que hay que ir más deprisa para doblegar la curva "porque está en riesgo la salud, la vida y la situación sanitaria".