El coronavirus, ya con tres olas conocidas en Castilla y León, ha dejado miles de fallecidos. Por de pronto, solo en el hospital con prueba diagnóstica realizada han sido 4.859 las personas que han perdido la vida, cifra que la Junta aumenta hasta los 9.271 entre los que también murieron en sus casas o en las residencias, así como aquellos que tenían síntomas compatibles con la enfermedad pero que no tuvieron confirmación mediante prueba, algo que ocurrió durante la primera ola.
Pese a estos números dramáticos, cuando además se está en uno de los momentos más difíciles de los más de diez meses de pandemia, son tres las zonas que no han sufrido la violencia del coronavirus en la peor de sus caras. Tres de 247 que existen en Castilla y León y que pintan un mapa cada vez más oscuro.
Las provincias de Burgos, León y Zamora tienen estos reductos cuyo comportamiento de la ciudadanía, y también la suerte, han permitido poder decir en febrero de 2021 que no cuentan con fallecidos. En la primera es Sedano, donde hasta 33 personas han enfermado desde el inicio en lo que supone apenas un 5,47% de su población. Con dos casos activos en la actualidad, ha logrado librar, de momento, la mortalidad por coronavirus. Eso sí, su situación en el ‘mapa Covid’ es naranja, aunque solo por un caso positivo en la última semana.
En León, mientras, Riaño tampoco ha sufrido fallecidos como consecuencia del coronavirus. En su caso, 80 personas han enfermado desde el inicio, con una tasa por tarjeta sanitaria de 4,84%. Actualmente, eso sí, pasa uno de sus peores momentos, con hasta 23 casos activos. No en vano, en la última semana se han dado cuatro casos positivos, que mantienen a la zona en naranja.
Y en Zamora, por último, Alta Sanabria ha mantenido a raya al coronavirus. Desde marzo, 46 personas se han infectado en la zona, un 5,64% del total de cartillas sanitarias, y actualmente son trece los casos activos. Es una de las pocas zonas de toda Castilla y León que cuenta con cero casos en la última semana.