La consejera de Sanidad, Verónica Casado, ha comparecido hoy a peticion propia en las Cortes de Castilla y León para informar sobre la situación sanitaria y epidemiológica en relación con la COVID-19, y ha avanzado además algunos de los aspectos más importantes de la reorganización del sistema sanitario en la Comunidad Autónoma.
Entre ellos ha anunciado la puesta en marcha de videollamadas a los pacientes, "no para una primera cita pero sí para consultas de seguimiento". "Tenemos un sistema de salud de nivel altísimo y profesionales altamente cualificados, y que se organizan magníficamente bien", ha subrayado.
El nuevo plan contempla una cartera con 48 servicios, 14 de ellos nuevos, con cuatro bloques. Destaca la creación de la nueva figura del educador para la salud, el refuerzo a la atención de salud mental, la reordenación de la atención primaria, el plan de urgencias y emergencias, la fusión de las historias clínicas duplicadas y las interconsultas no presenciales, así como un nuevo módulo de vacunas.
Además, hay dos proyectos medulares: listas de espera, Plan Persona, plan de canalización de la demanda, escritorio del profesional, derechos y garantías al final de la vida y consultas online.
Sanidad crea dos grupos de trabajo para abordar la patología no COVID y la postpandemia
La Consejería de Sanidad ha creado dos grupos de trabajo para abordar la patología no COVID y la postpandemia, que está integrado por profesionales de “reconocido prestigio”, de todas las áreas y representativos del ámbito de Atención Primaria y Atención Hospitalaira.
La consejera explicó que el grupo nace porque, tras la pandemia, será necesario seguir atendiendo la patología COVID; reforzar toda la no-COVID, así como detectar los problemas más importantes causados por el coronavirus, añadidos a los detectados previamente. "Se trata de priorizar estos problemas para abordarlos, y detectar las oportunidades de mejora," sentenció.
Durante el mes de abril, desde la Consejería de Sanidad se trabajará con estos profesionales el aumento de la presencialidad en Atención Primaria, manteniendo las consultas telemáticas para aquellas consultas que no precisen la visita al centro de salud o consultorio, “a petición de ellos”.
También, se centrarán en cómo recuperar la atención a la patología crónica; la plena actividad en screenings, así como mejorar la organización de agendas para reducir listas de espera en Atención Primaria, y la gestión conjunta de listas de espera y demoras hospitalarias.
Este grupo, integrado por 20 personas de Primaria, tanto médicos como enfermeros, y 26 de Atención Hospitalaria, nace para “compartir y realizar un análisis de la situación actual del sistema sanitario de la mano de los profesionales”, precisó la consejera, quien defendió que a lo largo de la pandemia la Consejería siempre se ha apoyado en los expertos para tomar sus decisiones.
La pretensión es dotarse de profesionales que conocen el sistema para avanzar en mejoras y una nueva organización en la vuelta a la presencialidad en Atención Primaria; identificar y priorizar los problemas en la atención a la patología NO COVID, especialmente en el ámbito hospitalario; mejorar las listas de espera, y proponer ideas para abordar dichos problemas que incluyan cambios tanto en la gestión de la administración como en la gestión de la atención a nivel de los profesionales.
También, quieren que identifiquen herramientas que puedan ayudar a impulsar el cambio; trabajar estrategias específicas y herramientas para mejorar la asistencia al paciente crónico, al paciente pluripatológico, al paciente crítico, al paciente quirúrgico, oncológico, con patologías no demorables y con patología banal.
En estos momentos, ya se están celebrando las primeras reuniones de los grupos de trabajo, y la consejera confía en que en el plazo de 15 días o un mes pueda tener ya las primeras conclusiones.