La consejera de Sanidad, Verónica Casado, confía en que Castilla y León pueda lograr la inmunidad de rebaño en la segunda quincena de agosto. Es decir, que la Comunidad pueda tener en esta fecha a entre el 70 y el 80 por ciento de la población total vacunada frente al COVID-19. No obstante, a finales de esta semana, principios de la siguiente, la previsión es que el 70 por ciento de los mayores de 12 años estén inmunizados.
Así lo indicó en la habitual rueda de prensa de los martes para informar sobre la situación epidemiológica, donde precisó que todo dependerá de la entrega de vacunas, ya que los servicios de salud pública están preparados para aumentar el ritmo de administración de dosis, que en las últimas semanas se está reduciendo en Castilla y León y en el conjunto de España.
A día de hoy se han administrado 2,98 millones de dosis, con 1,4 millones de personas inmunizadas con la pauta completa, es decir el 67 por ciento de la población mayor de 12 años. Además, el 76,4 por ciento ya ha recibido al menos una dosis.
Casado, que pidió al Ministerio del ramo que publique los criterios de asignación de vacunas, que sea transparente, precisó que la llegada de dosis está siendo irregular desde el inicio, “lo que dificulta seriamente la planificación”. Así, explicó que de diciembre a junio hubo un incremento progresivo, pero desde julio se nota la caída, que se va a prolongar a lo largo de agosto, cuando se estima que llegarán unas 9.700 dosis menos de Pfizer que en este mes.
Así, si en abril la Comunidad recibió 639.080 dosis; en mayo, 579.530 y en junio, 833.300, en julio estima que serán 528.990, de las que 341.640 se corresponden con dosis de Pfizer; 102.500, con AstraZeneca; 78.000, con Moderna, y 6.850, con Janssen.