La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha señalado hoy, a través de un comunicado, que en “en pocos días sabremos si la afirmación de la consejera de Sanidad, de que se van a mantener los 3.000 profesionales contratados actualmente a mayores para hacer frente a la pandemia del Covid-19, se ha cumplido o no”.
Una duda que mantiene el sindicato porque “las gerencias territoriales, de lo que sabemos hasta el día de ayer, no han recibido indicaciones, ni están trasladando esta voluntad, cuando muchos contratos terminan durante este puente de los Santos”.
CSIF reitera y urge la necesidad de que Sacyl mantenga esas contrataciones de refuerzo, “a las que hay que dar una mayor estabilidad temporal, no solo de uno o dos meses, con el objetivo de que las plazas que ocupan esos profesionales se añadan a plantilla orgánica de Sacyl, ya que la sanidad de Castilla y León, como venimos reivindicando desde hace antes de la pandemia, necesita más profesionales, tanto en el ámbito hospitalario como en Atención Primaria”.
Además, el sindicato ha pedido a la Consejería de Sanidad que “la reordenación de la Atención Primaria, o la resolución de los concursos de traslados y de la adjudicación de las plazas de las recientes oposiciones, no pueden ser una excusa para no seguir reforzando las plantillas, o para retener unos profesionales jóvenes que, en muchos casos, son recién licenciados, como ocurre en enfermería, que ahora se encuentran ante la decisión de continuar y asentarse en Castilla y León, o marcharse a otra Comunidad”.
Consolidad puestos fijos en plazas existentes
Sacyl puede llevar a cabo esa reorganización y recolocación de profesionales, porque son plazas conocidas que cambian de titular o dejan de ser temporales, al tiempo de reforzar y ampliar a mayores el personal del sistema sanitario público de la Comunidad, que está pidiendo más plantilla. “Si parte de ese personal de refuerzo pasa ahora a plazas ya existentes, y no se mantiene ese refuerzo, a mayores, no habremos hecho nada”, ha lamentado CSIF.
“La Junta tiene que evitar la fuga de profesionales sanitarios, que ahora viven en la incertidumbre, y que Sacyl no termina de despejar, al tiempo que oyen cantos de sirenas desde otras comunidades autónomas. Tiene que acabar con la incertidumbre y malestar en el que viven los profesionales con contratos temporales, cuando su futuro no está claro, dos o tres días ates de la finalización del contrato”.