SATSE Castilla y León critica el injustificable recorte en su paga extraordinaria que las más de 10.000 enfermeras y fisioterapeutas que trabajan en sanidad pública en la comunidad vuelven a sufrir en este mes de diciembre, un nuevo recorte que se mantiene desde hace 13 años.
El Sindicato de Enfermería, SATSE, en Castilla y León considera que este recorte no se justifica en las circunstancias socioeconómicas actuales y cuando en el sector privado la subida media de salarios, según convenios, ha alcanzado este año 2023 cerca del 5 por ciento de incremento.
Acabar con esta situación es una prioridad para SATSE, que ha realizado distintas acciones como propiciar que cerca de 33.000 enfermeras y fisioterapeutas se hayan dirigido ya individualmente por escrito al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
El último recorte del 27 por ciento de la cuantía total de la paga extraordinaria de este mes de diciembre (300 euros de media) se suma a todos los que cada una de las más de 10.000 enfermeras y fisioterapeutas de Castilla y León ha sufrido desde 2010. Estos importes llegan a alcanzar hasta más de 8.000 euros. La cuantía varía en función del número de años trabajados por cada enfermera o fisioterapeuta.
SATSE denuncia que todos los gobiernos que se han sucedido desde 2010 no han hecho nada por acabar con esta discriminatoria realidad laboral que, además de a las enfermeras y fisioterapeutas, afecta a todo el empleo público de nuestro país.
Acciones
En la anterior legislatura, el Sindicato solicitó a los grupos parlamentarios en el Congreso de los Diputados que dejasen de ser “cómplices” de los gobiernos de turno y que no apoyasen la inclusión en la Ley de Presupuestos Generales del Estado de la disposición que recorta las pagas extraordinarias de los empleados públicos.
SATSE también ha trasladado sendas quejas al Defensor del Pueblo y al Parlamento europeo. Con la constitución del nuevo Gobierno y del Congreso y Senado, SATSE reforzará su presión a nivel político e institucional para intentar acabar con esta discriminación hacia los profesionales públicos.
La organización sindical subraya que el recorte en las pagas extraordinarias de los empleados públicos se justificó por parte del Gobierno de entonces en la grave crisis económica registrada en aquel momento, pero “desde hace años no tiene justificación alguna”, apunta.
Pérdida de poder adquisitivo
El Sindicato de Enfermería resalta que, mientras que la situación de la economía de nuestro país ha mejorado, el encarecimiento del coste de la vida (bienes de consumo, energía, hipotecas…) se ha incrementado, especialmente en los últimos meses, con la consiguiente pérdida de poder adquisitivo.
SATSE incide en el hecho de que las enfermeras, fisioterapeutas y el resto de los trabajadores del sector público son los que más han sufrido el peso de los recortes a pesar de ser profesionales que garantizan servicios esenciales para la sociedad. Apunta, al respecto, que el trabajo que realizan con cada vez con menos recursos y medios se está “reconociendo y valorando” con salarios insuficientes y menos derechos.