VÍDEO | Cae una banda de tráfico ilegal de medicamentos que operaba en Salamanca y otras 14 provincias
Efectivos de la Agencia Tributaria, la Policía Nacional y la Guardia Civil han llevado a cabo conjuntamente la primera fase de una importante operación contra el tráfico ilegal de medicamentos, en la que han sido detenidas 47 personas, todas de nacionalidad española, excepto un súbdito portugués, en provincias como Madrid, Alicante, Gerona, Barcelona, Tarragona, Valencia, Almería, Jaén, Granada, Sevilla, Málaga, León, Salamanca, Valladolid y Canarias, a las que se les imputan delitos contra la salud pública, pertenencia a organización criminal, estafa, contrabando y blanqueo de capitales.
El cabecilla de esta organización delictiva, el ciudadano español A.D.G., ha sido detenido en Dubai (Emiratos Árabes Unidos), desde donde dirigía la misma, a la vez que se ocultaba con tres órdenes de detención internacionales en vigor por distintos delitos, todo ello gracias a la rápida coordinación de la Agregaduría de Interior de España y a las autoridades emiratíes, que ha permitido su inmediata extradición.
La investigación comenzó hace más de un año, a raíz de la colaboración ciudadana mediante una denuncia anónima, a partir de la cual se comenzaron a seguir distintos envíos aduaneros procedentes de Malasia que pudiesen contener principios activos de medicamentos sin ser declarados como tales.
Tadalafilo y Sildenafilo como complementos alimentarios
Esta organización criminal importaba fármacos en grandes cantidades desde Malasia, siempre declarados falsamente como complementos alimentarios y plantas naturales para sortear los controles aduaneros y comercializados posteriormente como vigorizantes 100% naturales, cuando en realidad se trataba, como ha quedado constatado en distintos análisis, de potentes fármacos como el Tadalafilo y el Sildenafilo, vasodilatadores destinados al tratamiento de la disfunción eréctil.
La ingesta de estos productos sin la supervisión médica puede provocar infarto de miocardio, angina inestable, arritmia ventricular, palpitaciones, taquicardias, accidente cerebro vascular e incluso muerte súbita.
A la vista de los resultados de estos análisis, la Agencia Española del Medicamento retiró del mercado determinados productos declarados como ‘naturales’, cuyo contenido no se correspondería con su composición, pudiendo ser altamente peligrosos para la salud de los consumidores.
Los cabecillas de esta organización, plenos conocedores de los efectos de estos productos debido a las quejas de clientes y a las continuas retiradas del mercado por parte de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios, se limitaban a cambiar los nombres comerciales y los empaquetados, continuando con su distribución y venta en una amplia red de establecimientos tipo herbolarios, sex shops y gimnasios, y también por internet. Entre las marcas intervenidas se encuentran 150 presentaciones diferentes.