El Juzgado de Instrucción número Dos de Salamanca ha absuelto a un ganadero de Ledesma y su hija al hallarse en la finca que regentaban dos ovejas muertas, una de ellas en estado de descomposición, el pasado febrero de 2020. Mientras, en la misma había cinco ovejas en buen estado y abundante pasto, según se refiere en la sentencia.
Además, se detectó un pony con una "longitud exagerada de los cascos de las cuatro extremidades" al no haberse practicado el arreglo funcional de los mismos aunque el animal se encuentra limpio y no presenta heridas, mientras que tiene acceso libre a comida y agua.
La sentencia incide en que el dueño visita frecuentemente la finca para comprobar que hay pasto y agua y que retiró los cadáveres de las ovejas una vez detectados, mientras que el pony llegó a la finca en 2017 tras un cambio por un caballo en una relación de pareja que mantenía la hija. Tras la ruptura se quedó en el lugar pese a que la acusada requirió a su expareja que se lo llevara, motivo por lo que el animal no está incluido en el código de equinos ni se le realizó el arreglo de los cascos.
Pese a ello sí se ha ocupado de la salud del pony proporcionándole comida y agua e incluso ya en el presente año se contrató a un herrero para el arreglo de los cascos.
Por todo ello, y una vez dilucidadas las causas, el Juzgado de Instrucción número Dos de Salamanca ha decidido absolver al padre y a la hija del delito de abandono de animales.