El constructor vallisoletano acusado de defraudar a la Seguridad Social acepta 2 años y una multa de 1,1 millones
La Audiencia de Valladolid dictará este miércoles sentencia condenatoria contra el empresario constructor A.M.C.C. por delito de fraude a la Seguridad Social, cargos reconocidos por el encausado y quien ya ha pactado una pena de dos años de cárcel, un año menos respecto de la inicial petición del fiscal.
Durante la vista, el industrial, su abogado y la acusación pública se limitarán a dar el sí definitivo al acuerdo ya alcanzado, en virtud del cual A.M.C.C. asumirá también la pérdida del derecho a la percepción de subvenciones o beneficios fiscales por espacio de cuatro años, el pago de una multa de 1.100.000 euros y el abono, en concepto de responsabilidad civil, de 533.445 euros en favor de la TGSS, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.
El empresario venía dedicándose a la actividad de la construcción desde abril de 2014 y bajo su cargo ha tenido a distintos empleados dados de alta en la Seguridad Social.
Sin embargo, con la finalidad de defraudar a la S.S. eludiendo el pago de dichas cuotas, ideó un plan que consistía en la creación de sucesivas empresas con distintas denominaciones pero con idéntico objeto social, misma plantilla y actividad.
Una vez que la mercantil acumulaba deudas con la S.S. por el impago de las cuotas de los trabajadores, el industrial dejaba la misma sin actividad y descapitalizada, y a pesar de su obligación de disolverla o declarar el concurso, trasvasaba los trabajadores a una nueva empresa sucesora que creaba y con la que continuaba realizando idéntica actividad, aunque sin la deuda acumulada anteriormente.
A través de este procedimiento, el acusado, actuando bien como empresario individual, como socio y administrador único, creó dos sociedades distintas y logró eludir el pago a la S.S. de las cuotas correspondientes a las mismas, superiores a 50.000 euros durante cuatro años naturales.