La Audiencia de Valladolid celebrará este viernes la vista de conformidad en la que el vecino de Pedrajas de San Esteban S.L.N, acusado de un delito contra la salud pública y otro de tenencia de moneda falsa, aceptará una condena de año y medio de cárcel.
El juicio estaba previsto para este jueves pero finalmente se ha acordado trasldar a este viernes la comparecencia del acusado para que dé el sí definitivo al acuerdo alcanzado con la acusación pública, consistente en un año y medio de cárcel por delito de tráfico de drogas--le pedían cuatro años y medio--, tras haber retirado el fiscal los cargos por el delito de tenencia de moneda falsa por el que pedía otros dos años y medio, según la información del Diario de Valladolid el Mundo recogida por Europa Press.
Los hechos se remontan al verano de 2019, cuando, en un primer episodio, efectivos de la Guardia Civil se desplazaron hasta el domicilio del encausado, de 43 años, con motivo de un altercado en el interior de su vivienda sostenido con una mujer--tal suceso se sigue en un procedimiento distinto--que, a la llegada de los agentes, hizo entrega voluntariamente a los funcionarios de 3,5 gramos brutos de MDMA que había el domicilio y 320 billetes de 20 euros falsos.
Con posterioridad, el día 25 de julio, cuando agentes del Instituto Armado circulaban por el casco urbano de Pedrajas, concretamente por la Avenida Juan Carlos I, fueron requeridos por un vecino que les hizo entrega de un envoltorio de plástico con 0,65 gramos de speed que, según les dijo, le había suministrado el procesado. El denunciante explicó que era toxicómano y que no quería volver a consumir tras haber permanecido en varios centros de desintoxicación.
Ante ello, la Guardia Civil registró tres días después el domicilio del acusado, con la preceptiva autorización judicial, y se incautó de anfetamina en el interior del congelador, así como de numerosos efectos para la distribución de sustancias, entre ellos envoltorios, alambre de color verde, varias básculas, una cuchara sopera con restos de droga, 22 billetes falsos por importe global de 440 euros y un libro de cuentas con numerosas anotaciones de supuestas ventas a clientes.
Consta un informe médico en el que se reconoce que el acusado presenta abuso de tóxicos y un síndrome de dependencia al alcohol y otros estimulantes.