El Seprona de la Comandancia de la Guardia Civil de Segovia incautó una cabeza de corzo sin precintar y el rifle utilizado para abatir el animal ocultos en el maletero de un vehículo en el término municipal de Sepúlveda. Esta actuación se enmarca en la prevención de infracciones penales y administrativas relacionadas con la caza, en concreto, con la modalidad de caza de corzo al rececho, vigente entre los meses de abril y agosto.
Los agentes, con la ayuda de los prismáticos vieron un vehículo en un coto de caza y observaron a dos personas con atuendo de cazadores manipulando y guardando útiles en el vehículo. Tras desplazarse hasta el lugar, los agentes advirtieron que el automóvil estaba saliendo del acotado. Se paró al vehículo para la identificar a los cazadores y comprobar que se cumplían los requisitos necesarios para el ejercicio de la caza.
Los agentes notaron que uno de los cazadores tenía manchas de sangre en la mano y se les preguntó si habían abatido algún animal. La respuesta fue que acaban de cazar un corzo macho, en la modalidad de rececho, y que portaban el trofeo en el maletero.
Al abrir el maletero se comprobó que llevaban únicamente la cabeza y los lomos del animal abatido, y que no ha sido precintado como establece la Ley de Caza en Castilla y León, que obliga al precintado y marcado de la matriz del precinto de ciertas piezas de caza, entre las que se encuentra el corzo (Capreolus capreolus), por lo que fueron propuestos para sanción. La cabeza del animal no precintada y el arma utilizada fueron retiradas y pasaron a disposición de la Autoridad competente.
Para el Seprona resulta de gran importancia para el esclarecimiento de estos hechos de caza furtiva, que se producen tanto en fincas privadas, zonas públicas e incluso en espacios protegidos, la colaboración ciudadana, ya estos hechos producen daños al patrimonio, a la fauna e incluso pueden producirse daños personales al no guardarse las oportunas normas de seguridad en el uso de las armas de fuego.