El Tribunal Supremo de Castilla y León ha confirmado la sentencia de la Audiencia Provincial de Zamora que condenaba a seis años de prisión y diez de libertad vigilada a un hombre de 73 años, por agredir sexualmente a su nieta durante los periodos vacacionales, desde que ella tenía 11 hasta los 15 años.
Además, la Justicia impone una orden de alejamiento de diez años de la víctima, donde el procesado no podrá acercarse a la víctima ni a su domicilio a una distancia inferior a 500 metros ni comunicar con ella en forma alguna, ni por carta, teléfono fijo o móvil, correo electrónico, redes sociales. Finalmente este hombre tendrá que indemizar con 10.000 euros a su nieta por todos los abusos sexuales padecidos.
Todo comenzaba en el año 2014, cuando la niña, que por entonces tenía once años, pasaba las temporadas de verano y de Semana Santa en el domicilio de su abuelo, en la provincia de Zamora. Durante el juicio ha quedado demostrado que este hombre se se introducía en la cama junto a ella y, sin mediar palabra, la hacía objeto de tocamientos por debajo y por encima del pijama o la ropa que llevaba puesta, en sus partes íntimas, con el pleno conocimiento de la corta edad de la víctima que le daba su parentesco con ella.
Contra esta sentencia, que no es firme, cabe recurso de apelación para ante la Sala de lo Civil y Penal del tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Autónoma de Castilla y León, el cual se interpondrá en el plazo de los diez días siguientes a la última notificación de esta sentencia.