Dramática, dura y difícil jornada de asimilar para Ávila. El incendio originado de forma fortuita por un turismo en la carretera AV P-415, en la mañana del sábado entre Navalacruz y Cepeda de la Mora, mantiene en vilo a la provincia. Ha calcinado ya más de 10.000 hectáreas, según las estimaciones transmitidas por la Delegación del Gobierno, obligado a evacuar a 900 personas de cuatro poblaciones, cortado cinco carreteras y quemado varias viviendas, aspecto sobre el que las autoridades aún no pueden detallar. Junta y Gobierno han solicitado la activación del sistema satelital Copernicus para el incendio de Navalacruz y tener información sobre la magnitud y afección del fuego.
Durante la jornada, los medios terrestres y aéreos han centrado sus esfuerzos principales en la defensa de los pueblos afectados al norte del incendio, con lo que no han podido desarrollar las mismas labores en la zona de monte que se está quemando. Actualmente, la cabeza principal se sitúa al este-noroeste, con varias lenguas de fuego en la parte norte derivadas del incendio principal. Preocupa la evolución que pueda tener en la cara sur, debido a que, si sigue avanzando sin control, pudiera tener afecciones en un futuro a los pueblos situados en dicha dirección.Hasta el momento se han evacuado unas 900 personas de las localidades de Villaviciosa y Robledillo, ambos anejos de Solosancho, así como Palacios de Sotalbo, Sotalbo y en determinados momentos del día, también Riofrío, donde sus residentes han podido regresar, pero advertidos de que en cualquier momento la cercanía de las llamas les puede empujar a salir de nuevo. También está en alerta por posible evacuación Mengamuñoz y La Hija de Dios.
El Ayuntamiento de Ávila y la Diputación Provincial, en colaboración con la Junta, han habilitado diferentes puntos para alojar a los desalojados de sus casas que lo necesiten. Hasta ahora se contabilizan 35 personas albergadas en el polideportivo Carlos Sastre de la capital amurallada y varios mayores en el Centro Residencial Infantas Elena y Cristina (CRIEC) para alojar a quienes necesitan cuidados especiales.También ha sido necesario el corte de cinco carreteras, entre ellas la N-502, que se une a la AV-933, AV P – 502, AV P -406 y AV 900. Hay constancia de que hay inmuebles y propiedades afectadas en los diferentes pueblos, pero la propia Delegación admite que por el momento no hay cifras exactas.
En estos momentos, la Junta de Castilla y León tiene todos los “medios propios posibles” involucrados en la extinción de este incendio, a los que se suman los enviados por parte del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico y que suman más de medio millar de efectivos que trabajan en la extinción de las llamas.
En total, 23 medios aéreos: 17 helicópteros, dos aviones anfibios, el coordinador con base en La Virgen del Camino y tres bombarderos, procedentes del dispositivo de Castilla y León, además de Madrid, Extremadura y Castilla-La Mancha. Se suman 11 técnicos, 15 agentes medioambientales, dos centros de mando avanzado, 10 brigadas helitransportadas, seis de lucha contra incendios, tres buldócer, 14 autobombas, 13 cuadrillas de tierra y cuatro unidades de intervención de la Unidad Militar de Emergencia (UME). A estas horas se han desmovilizado un avión anfibio con base en Torrejón (Madrid) y dos de carga en tierra de Agoncillo (La Rioja).
Ricardo Muñoz Martín / ICAL . Vecinos de la localidad abulense de Solosancho, observan las tareas de extinción del incendio originado en Navalacruz (Ávila)