La Policía Local del Ayuntamiento de León fue requerida anoche, hacia las 00:30 horas, por quejas vecinales ante el sonido continuado de las campanas de la Iglesia de Las Ventas, situada en la plaza Juan de Austria. Ante la evidente alteración del descanso vecinal, se contactó con el encargado, quien cortó el fluido eléctrico que abastece el motor de las campanas, con el objetivo de cesar los sonidos.
Por otra parte, agentes de la Policía Local requirieron, en la madrugada de ayer, hacia las 3:00 horas, al equipo de Policía Judicial de Tráfico para realizar una prueba de alcoholemia al conductor de un turismo que circulaba por la LE-11, a la altura del punto kilométrico 1, al apreciar en el mismo signos de haber consumido bebidas alcohólicas. La prueba arrojó un resultado de 0.46 mg/l y el vehículo fue retirado al depósito municipal.