Agentes de la Policía Nacional de Burgos detuvieron a dos hombres y dos mujeres pertenecientes a una organización criminal dedicada a la trata con fines de explotación sexual. Las víctimas eran captadas en Colombia, país de origen de dos de los detenidos. Al menos 13 mujeres podrían haber sido víctimas de la organización, que comenzó su actividad ilícita en 2018. Con su desarticulación se ha conseguido erradicar la prostitución que se ejercía en tres pisos particulares de Burgos, según informaron hoy fuentes de la Subdelegación del Gobierno.
En febrero de este año, agentes de la Comisaría Provincial de Burgos, especializados en la lucha contra el tráfico de seres humanos, iniciaron una investigación sobre varias personas, entre las que se encontraban ciudadanos españoles y de origen colombiano. Sobre estos había sospechas de que pudieran formar parte una organización criminal dedicada a la trata de seres humanos con fines de explotación sexual y otros delitos relacionados con estas actividades.
Una vez llevadas a cabo las primeras actuaciones se pudo constatar que su ámbito de actuación era la Comunidad de Castilla y León, si bien su actividad principal estaba centrada en Burgos. Las víctimas eran mujeres de nacionalidad colombiana, sobre las que se ejercía la explotación y a las que se obligaba a ejercer la prostitución en distintos inmuebles de esta ciudad.
La organización las captaba en Colombia aprovechándose de su situación de precariedad económica y con falsos ofrecimientos laborales, les pagaban el viaje a España -con lo que les generaban una importante deuda económica-, obligándolas a ejercer la prostitución para pagar la deuda contraída. A esta primera deuda sus explotadores les iban sumando nuevos recargos y multas, por lo que nunca podrían acabar de pagar las cantidades reclamadas y quedando, por tanto, sujetas a los caprichos de los traficantes, bajo amenazas directas sobre sus personas o sobre los familiares que habían dejado en Colombia.
En el transcurso de la investigación se pudo determinar que al menos 13 mujeres podrían haber sido víctimas de esta organización desde su inicio en 2018, consiguiendo la Policía Nacional que dos mujeres, víctimas de la trata de seres humanos, tengan la condición de testigos protegidos.
Este agosto se ha llevado a cabo la detención de cuatro personas (48 años, 41 y 57, residentes en Burgos, y otra, de 42, domiciliada en Valladolid). A ellas se les imputan los delitos de Trata de Seres Humanos, Contra los Derechos de los Ciudadanos Extranjeros, Contra los Derechos de los Trabajadores y otros relativos a la Prostitución, Blanqueo de Capitales y Pertenencia a Organización Criminal.
Se intervinieron diferentes dispositivos informáticos y varios teléfonos móviles, prosiguiendo la investigación para determinar la implicación de otras personas. Los detenidos pasaron a disposición de la Autoridad Judicial, quien decretó su ingreso en prisión. Con la detención de los integrantes de esta organización criminal se ha conseguido erradicar la prostitución que se venía ejerciendo en tres pisos particulares de la ciudad de Burgos.