El embajador y el cónsul de España en Tanzania, Jorge Moragas Sánchez y José Ramos García, han visitado el proyecto de cooperación al desarrollo 'Defendiendo el derecho a una salud materno-infantil de calidad en Kigoma'.
Una iniciativa financiada por la Junta de Castilla y León a través de la Dirección General de Acción Exterior con 169.000 euros, y desarrollada por las delegaciones española y tanzana de Cruz Roja con otros 65.000 euros, que ha tenido como objetivo reducir las tasas de mortalidad materna y neonatal en la región de Kigoma, una zona donde urge evitar la mortalidad materna y perinatal, teniendo en cuenta las particularidades del lugar, así como que la tasa de embarazo adolescente es del 27 %, la tasa de maternidad media es de alrededor de siete hijos por mujer, y el 21,6 % de las mujeres de las zonas rurales tardan más de dos horas en acceder al centro de salud más cercano.
Además, más de un tercio de los menores de cinco años presentan retraso del crecimiento, uno de cada cinco está por debajo del peso que le correspondería por edad, y dos de cada tres tienen anemia.
La visita del embajador y el cónsul tuvo lugar entre los días 4 y 5 de junio, estuvo coordinada por la delegada de Cruz Roja en España, Ana Albiol, y sirvió para dar a conocer las intervenciones ejecutadas como parte de este proyecto y el impacto que estas siguen teniendo en Kigoma, Tanzania.
Ahora, se ha podido conocer que la Embajada de España en Tanzania, que también ha querido dar visibilidad a esta visita en redes sociales, ha catalogado como "excelente" el trabajo en defensa del derecho a la salud materno-infantil y a la nutrición de calidad, el que sin duda se ha convertido en el objetivo de la Dirección General de Acción Exterior de la Junta para cada uno de estos proyectos de cooperación.
Este, en concreto, ha tenido como resultado la construcción de un centro de maternidad operativo y funcional con todo el equipamiento necesario para atender urgencias obstétricas, la incorporación de un profesional de salud formado en el manejo de emergencias obstétricas en al menos ocho centros de salud de la región, la implantación servicios de salud sexual y reproductiva para jóvenes y adolescentes en diez centros médicos, y la impartición de educación a la población en materias de salud sexual y reproductiva, los signos de alarma durante el embarazo, o la importancia de las prácticas alimentarias, entre otras acciones.
Según señalan desde la Junta, el año pasado se aprobaron 27 ayudas para actuar en 11 países empobrecidos, por valor de 3.617.360 euros, y que mejoraron la calidad de vida de 196.226 personas. Recuerdan, además, que el plazo de presentación de solicitudes para la financiación del proyecto de este año continúa abierto hasta el 27 de julio.