El miedo al Covid desploma la llegada de turistas extranjeros a Castilla y León, casi un 72% menos
J.L.
¿El verano no es para extranjeros? Una pregunta incoherente en cualquier otro momento de las últimas décadas en Castilla y León pero que tiene una respuesta obvia en este 2020. El miedo al COVID-19, unido a las restricciones de movilidad de numerosos países del planeta, ha motivado el desplome lógico de la llegada de viajeros internacionales un 71,8 por ciento entre junio y septiembre, con 166.923 personas en total, muy lejos de las casi 600.000 que pasaron y pernoctaron en época estival en 2019 en la Comunidad, en lo que fue uno de los mejores veranos en este sentido. Ello ha motivado una caída del gasto del 76,2 por ciento, con 67,6 millones de euros.
A pesar de la caída, la evolución fue ligeramente peor en España, que recibió 6,25 millones de turistas internacionales entre junio y septiembre, los cuatro meses más potentes del año para el turismo español, un 83,4 por ciento en comparación con el mismo periodo de 2019, según los últimos datos del sector publicadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y a los que tuvo acceso Ical.
En cuanto al gasto de turistas internacionales, se redujo en el acumulado entre junio y septiembre un 86 por ciento respecto al mismo tramo de 2019 y pasó de 42.950 millones de euros el año pasado a 6.007 millones este año, lo que supone 36.943 millones menos.
En Castilla y León, el gasto medio por turista ascendió a 405 euros, un 15,5 por ciento menos que en verano de 2019, de los que 87 fueron de media diaria, un 17,2 por ciento menos. Ello concluye en una duración media del viaje de 4,7 días, curiosamente 2,07 jornadas más que el pasado año. Es decir, llegan menos turistas a la Comunidad, pero lo hacen más tiempo. En España, el desembolso medio por turista se situó en 849 euros, con una bajada anual del 22 por ciento. Por su parte, el gasto medio diario disminuyó un 30,7 por ciento, hasta los 106 euros. Y la duración media fue de ocho días, lo que supone un aumento de 0,9 jornadas respecto a la media de septiembre de 2019.
Aunque en menor medida, los principales viajeros proceden de Francia, con 102.460 desde junio a septiembre, es decir, seis de cada diez de los 166.923. La cifra de ciudadanos galos que llegaron en verano a Castilla y León es un 71,8 por ciento menos que el pasado año, cuando optaron por conocer alguna de las nueve provincias 257.113 personas. Durante este año, en el periodo de estudio, optaron por conoce la Comunidad 11.122 alemanes, 7.856 británicos y 5.054 belgas, las cuatro principales nacionalidades que visitaron la autonomía desde junio.
Los principales países emisores entre enero y septiembre en España fueron, también, Francia (con cerca de 3,3 millones de turistas y un descenso del 64,2 por ciento respecto a los nueve primeros meses de 2019), Reino Unido (con más de 2,8 millones y un 80,8 por ciento menos) y Alemania (con casi 2,2 millones, un 75,8 de caída).
Casi 145.000 viajeros del total llegaron por carretera, la vía habitual de entrada, mientras que 17.615 lo hicieron utilizando el avión. Además, algo más de 19.000 personas pasaron más de 15 días en la Comunidad, mientras que cerca de 50.000, entre cuatro y 15 días.
Retrocesos nacionales
Los datos del INE desvelan también los datos de septiembre a nivel nacional, que reflejan 1,1 millones de llegadas internacionales y un gasto de 967 millones de euros, es decir, bajadas respecto al mismo mes del año anterior del 87,1 y el 89,9 por ciento, respectivamente. En ambos indicadores, las caídas interanuales son porcentualmente más acusadas que las registradas en julio y agosto.
En cuanto al origen de los visitantes, Francia fue en septiembre el principal país emisor, con 389.773 turistas, lo que representa más de una tercera parte del total, pero un descenso del 60,4 por ciento respecto a septiembre del año pasado.
Por comunidades autónomas, Cataluña fue el primer destino principal de los turistas en septiembre, con el 24,2 por ciento del total. Le siguieron Valencia (16,2 por ciento) y Andalucía (15,7). A Cataluña llegaron 276.064 turistas, un 86,3 por ciento menos que en septiembre del año pasado.