La agencia espacial estadounidense (NASA) ha anunciado este jueves el descubrimiento de dos nuevos exoplanetas, Kepler-90i y Kepler 80g, que orbitan alrededor de una estrella lejana, Kepler-90, que se encuentra a 2.500 años luz de distancia de la Tierra y que forman parte de un sistema parecido a nuestro Sistema Solar. En el caso del Kepler-90i, se trata de un planeta rocoso y caliente que orbita alrededor de su estrella cada 14,4 días.
El descubrimiento se ha llevado a cabo gracias a la tecnología de la NASA y su telescopio Kepler, junto a inteligencia artificial proporcionada en colaboración con el gigante tecnológico Google. La agencia espacial noreamericana se ha valido de lo que se conoce como 'machine learning' (aprendizaje automático), que capacita a las máquinas para analizar los datos procedentes del potentísimo telescopio.
Los responsable han sido los investigadores Christopher Shallue y Andrew Vanderburg, quienes entrenaron a un ordenador con inteligencia artificial para aprender cómo identificar exoplanetas en las lecturas de luz registradas por Kepler a través de un minúsculo cambio en el brillo capturado cuando un planeta pasaba o transitaba frente a una estrella.
"El sistema de estrella Kepler-90 es como una miniversión de nuestro Sistema Solar. Tienes planetas pequeños adentro y grandes planetas afuera, pero todo está agrupado mucho más cerca ", dijo Vanderburg, posdoctorado de la prestigiosa beca Sagan de la NASA y astrónomo de la Universidad de Texas en Austin.
Shallue, un ingeniero de software que trabaja con el equipo de investigación de Google Artificial Intelligence, tuvo la idea de aplicar una "red neuronal" a los datos de Kepler. Se interesó en el descubrimiento de exoplanetas después de descubrir que la Astronomía, al igual que otras ramas de la ciencia, se está inundando rápidamente de datos a medida que avanza la tecnología para la recolección de los mismos desde el espacio. "En mi tiempo libre, comencé a buscar en Google 'encontrar exoplanetas con grandes conjuntos de datos' y descubrí la misión Kepler y el enorme conjunto de datos disponibles", señaló.
Por su parte, el director de la División de Astrofísica de la NASA, Paul Hertz, se congratuló del trabajo de colaboración con el gigante tecnológico. "Tal como esperábamos, hay descubrimientos emocionantes acechando en nuestros datos archivados de Kepler, esperando la herramienta o la tecnología adecuada para desenterrarlos", indicó. "Este hallazgo muestra que nuestros datos serán un tesoro disponible para los investigadores innovadores en los próximos años", agregó.
La misión Kepler fue la primera en el mundo con la capacidad de detectar realmente planetas análogos a la Tierra orbitando estrellas similares a nuestro Sol en una zona habitable. Desde que la NASA lanzase este telescopio al espacio en el año 2009, se han descubierto más de 2.000 exoplanetas.