El volcán Cumbre Vieja de La Palma sigue expulsando lava sin control después de que este lunes frenara su actividad durante unas horas.
El volcán de La Palma ha entrado en una fase efusiva, lo que quiere decir que tendrá menos explosiones y el cono principal tendrá menos protagonismo, de forma que la expulsión de la lava, que ahora es más viscosa, se concentra en una boca que está fuera del cono.
La nueva lava es de tipo hawaiano, más fluida y con mayor capacidad para moverse, ha indicado el portavoz del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan), David Calvo, cree que el nuevo. A su paso, se han destruido casi 690 edificaciones y campos de cultivo, como se ve en un vídeo de la Unidad Miltar de Emergencias.
La nueva lava sale de un cráter pequeño, de una boca que emite menos ceniza y menos piroclastos que el centro emisor principal y aunque le cuesta formar su propio cono, echa un chorro "impresionante" de lava, ha afirmado el portavoz del Involcan.
En esa boca siempre ha salido lava más fluida, pero a última hora de la tarde del lunes "empezó a vomitar lava sin parar", ha comentado David Calvo.
En otro vídeo, en esta ocasión del Instituto Geológico y Minero de España, se observa la velocidad de este tipo de lava, que amenaza la zona de Tazacorte.
Más rápida para llegar al mar
Que la lava sea más fluida hace que tenga más capacidad de movimiento y de ocupar terreno, y como es menos densa se moverá menos forzada, no hará los "murallones" de su predecesora y al ser más rápida se facilitará la llegada al mar.
La nueva lava se ha solapado con las coladas anteriores pero también intenta progresar, aunque como va en dirección a la pendiente los brazos que intentan separarse terminan por unirse, ha manifestado el portavoz del Involcan. Esta nueva lava tiene el camino más fácil al ir sobre coladas anteriores.