El cono principal del volcán Cumbre Vieja de La Palma ha sufrido hacia las 21:10 horas de este domingo un derrumbe parcial de su estructura a la vez que se ha incrementado la actividad efusiva, con la emisión de lava fluida, tal y como ha informado el Instituto Volcanológico de Canarias.
Asimismo, se observa un mayor caudal de salida de lava, pero discurre por el mismo canal que había hasta ahora y de momento no se han observado nuevas afectaciones por este motivo.
El volcán de Cumbre Vieja cumple este domingo dos semanas desde que entró en erupción y la actividad explosiva se ha incrementado, por lo que no se descarta la aparición de nuevos centros de emisión, acorde con las noticias que emite diariamente el Comité Científico del Pevolca.
La lava que emerge de los dos últimos puntos emisores de la erupción discurre como una sola colada y, tras contactar con la primera que se originó hace quince días, ahora discurre de forma paralela con la que termina en el mar, donde ya ha creado una superficie de 28 hectáreas.
La responsable de Sismología de Instituto Geográfico Nacional, Carmen López, y el director técnico del Plan de Prevención de Riesgo Volcánico de Canarias (Pevolca), Miguel Ángel Morcuende, han explicado este domingo en rueda de prensa la evolución de la erupción volcánica.
López ha indicado que, si bien la actividad del tremor es más intensa, todavía no ha llegado al nivel registrado entre los días 24 y 27 de septiembre. Sin embargo, ambos especialistas han tranquilizado a la población de La Palma, asegurando que la situación no es la misma que la registrada hace dos domingos y que la alternancia actual de fases está dentro de lo esperable.
La responsable ha explicado, además, que en la actualidad se observan varios centros activos en el interior del cráter principal y dos situados en el sector noroeste del lateral del cono. La morfología del cono, ha señalado, cambia continuamente y ahora es "más ancho, más bajo y está cerrado".
La calidad del aire, en escena
La inversión térmica que afecta estos días a la isla y los vientos predominantes son desfavorables para la calidad del aire, tal y como han asegurado los expertos, que han precisado que el volcán emite 3.813 toneladas de gases mientras que las partículas menores de 10 micras se han detectado en todas las estaciones de la isla, y con mayor intensidad en las cercanas al volcán.
Esta configuración podría provocar la llegada de ceniza fina a la isla de El Hierro y en la vertiente oeste, en las zonas próximas a la erupción y a las zonas de colada, el régimen de viento predominante serán las brisas.
La calidad del aire fue el motivo por el que fueron evacuados personal científico y del dispositivo de emergencia que trabajaba en las cercanías de la erupción volcánica.
En el resto de las zonas, la calidad del aire es bueno aunque ha recomendado el uso de mascarilla, especialmente en las personas con problemas respiratorios, inmunodeprimidas, niños y embarazadas.
Daños materiales
Dos semanas después de que la primera erupción del Cumbre Vieja sorprendiera a La Palma, la superficie afectada es de 399 hectáreas, 52,5 más que este sábado, y la anchura del frente lávico tiene 950 metros.
Hay 30,7 kilómetros de carreteras inutilizadas y las edificaciones destruidas son, de acuerdo al último dato de Copernicus, 946 mientras que otras 128 están dañadas o en riesgo.
La erupción ha obligado a evacuar a más de 5.000 personas en La Palma. La ceniza expulsada por el volcán ha cubierto una superficie de 3.304 hectáreas
Emisión de bombas volcánicas
Se han observado a lo largo del día de ayer emisiones de bombas volcánicas, un tipo de piroclasto de varios metros que alcanzaron la base del cono. La altura medida de la columna de cenizas y gases alcanza los 3 kilómetros, mostrando una parte más dispersa, que alcanza una altura de 5 kilómetros.
La sismicidad continúa localizándose cerca de la sismicidad de los primeros días, a profundidades entre los 10-15 km. Se registran además terremotos situados a profundidades superiores a los 20 km.
En las últimas 24 horas se han localizado algunas decenas de sismos, el mayor de 3.6 de magnitud, que ha sido sentido con intensidad III.
La erupción llega a Azores
Partículas del material expulsado por el volcán han alcanzado al archipiélago atlántico de Azores y han provocado una reducción de la visibilidad, según el Instituto Portugués del Mar y la Atmósfera (IPMA).
La Palma y Punta Delgada, la capital de Azores, distan más de 1.200 kilómetros pero el viento ha transportado partículas de la erupción del volcán, que han llegado a las islas lusas "en forma de aerosol sulfato", según el organismo portugués.
Estos "aerosoles" contribuyen a una "dispersión de la luz" y provocan una reducción "significativa" de la visibilidad, agrega el IPMA, en especial en zonas inferiores a los 800 metros de altitud.
Además, la "elevada humedad" que se registra en las Azores contribuye a aumentar el tamaño de las partículas, lo que se ha traducido en las últimas horas en una intensa neblina.