España tiene 109 investigadores entre los más citados del mundo, un selecto club que mide el impacto de sus trabajos de los últimos diez años en su área de conocimiento. Una elite conformada por 6.602 investigadores, el 1% del músculo científico del planeta.
La consultora Clarivate, dedicada a medir el impacto de las revistas científicas, ha publicado su listado anual de expertos, en el que figuras como Mariano Barbacid o María Blasco han quedado fuera. ¿La razón? Su investigación de mayor impacto (es decir, la más citada por los científicos de su área) se produjo hace más de una década, que es el periodo que fija Clarivate para evaluar el estatus actual del investigador.
España es el noveno país con el mayor número de investigadores superclase. Sin ninguna sorpresa, Estados Unidos se sitúa en el primer lugar, pero su preponderancia se está debilitando: si hace cuatro años el 43,3% de este listado trabajaba en el país norteamericano, ahora lo hace el 39,7%.
Por supuesto, ha sido China el país que más ha crecido en este tiempo, pasando de tener el 7,9% al 14,2% de los científicos de elite, un reflejo de la apuesta por la investigación que está llevando a cabo en los últimos años. La consecuencia es que los científicos chinos ya no tienen que irse a Estados Unidos a labrar su carrera investigadora sino que la pueden hacer en el propio país.
El top 5 de países con mayor número de investigadores en ese 1% de más citados lo completan Reino Unido, Australia y Alemania. Mientras que los dos estados europeos han perdido cuota desde 2018, Australia la ha ido incrementando y ha superado al vecino germánico.
Instituciones con más investigadores
El listado de Clarivate no es un ranking de investigadores, no están clasificados por el impacto de sus trabajos (número de citas en otros estudios en un periodo concreto). Sí que se puede tantear la influencia de las instituciones españolas por el número de investigadores de elite que trabajan en ellas.
Aunque aquí también hay truco: las instituciones más grandes son las que tienen más investigadores de alto impacto. Así, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, el CSIC, alberga a 24 científicos de la lista, aunque repartidos en numerosos campos.
La siguiente institución, con 15 científicos, es el Centro de Investigación Biomédica en Red, Ciber, que en realidad es el mecanismo del Instituto de Salud Carlos III para coordinar la investigación sobre una misma área médica de diferentes grupos en toda España.
En cuanto a las universidades, hay dos que destacan sobre el resto: la de Barcelona y la de Granada. La primera de ellas cuenta con 11 investigadores en el listado, en el que destacan el hepatólogo Jordi Bruix, el médico internista Ramón Estruch o el especialista en epigenética Manel Esteller. El perfil de esta institución es marcadamente médico, fruto de su colaboración, entre otros, con el Hospital Clínic y su instituto de investigación, Idibaps, que incluye 6 investigadores de alto nivel.
La Universidad de Granada tiene 8 científicos en el listado, la mayoría de ellos perteneciendo a Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial, como Francisco Chiclana, catedrático de Computación Inteligente, o el matemático Francisco Herrera.
Sin embargo, ninguna institución española se acerca a las grandes universidades del mundo. Harvard tiene 214 científicos, Standford, 122; Oxford, 51. Otros organismos de investigación, como la Academia China de las Ciencias (el CSIC chino) cuenta con 194 investigadores. Los Institutos Nacionales de Salud de EEUU (el Instituto Carlos III norteamericano) tiene a 93 científicos, y el Instituto Max Planck alemán (el CSIC germano), a 70.
En España sorprende, además, la ausencia del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) en este listado. Su primo-hermano de investigaciones cardiovasculares, CNIC, solo tiene a un investigador, Andrés Hidalgo. El director de este centro, Valentín Fuster, aparece relacionado únicamente al hospital Mount Sinai de Nueva York.