La Tierra ha batido por segundo día consecutivo el récord histórico de temperatura media más alta. Este martes 4 de julio, la temperatura del aire fue de 17,18ºC, según los Centros Nacionales de Predicción Ambiental (NCEP) de Estados Unidos. La cifra supera el récord registrado el lunes 3 de julio, con 17,01ºC. Ambas cifras superan el récord establecido en agosto de 2016 con 16,92ºC.
Precisamente, el lunes, la Organización Meteorológica Mundial confirmaba que el fenómeno conocido como El Niño iba a volver a causar estragos en todo el planeta. Los científicos de la prestigiosa institución advertían que el calentamiento global y este fenómeno conducirían a temperaturas récord. Y ya se está notando.
Así lo confirma el experto climático Robert Rohde en su cuenta de Twitter, quien afirma que los récords que se están registrando estos días se deben a la combinación de El Niño con el calentamiento global. "El calentamiento global nos está llevando a un mundo desconocido", ha afirmado el climatólogo.
En Estados Unidos, por ejemplo, hasta 40 millones de personas se encuentran actualmente en alerta por altas temperaturas. China también se encuentra bajo los terribles efectos de una ola de calor que deja temperaturas superiores a los 35ºC. Incluso la Antártida, en invierno, registra actualmente temperaturas anormalmente altas. Pero los países en los que más se está notando este calor anómalo son en el norte de África, donde se han alcanzado temperaturas cercanas a los 50 ºC.
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"El Niño aún no ha alcanzado su punto máximo y el verano todavía está en pleno apogeo en el hemisferio norte, por lo que no sería sorprendente que el récord se rompiera nuevamente en los próximos días o semanas", ha explicado Paulo Ceppi, profesor de Ciencias del Clima del Imperial College London en declaraciones al diario británico The Guardian.
Otro récord en España
España no ha tenido máximas tan altas como las del continente africano. Sin embargo, el pasado mes de junio fue un grado centígrado más cálido de lo normal y el segundo más lluvioso en lo que va de siglo, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). El portavoz de la AEMET, Rubén del Campo, señala que la temperatura media de junio de 2023 fue de 21,1ºC, lo que supera en 1ºC la media normal del periodo de referencia 1991-2020.
Del Campo también destaca especialmente el carácter cálido de las noches, que tuvieron de media 1,8ºC más que la media normal, lo que convierte a este periodo en el tercer junio con las temperaturas mínimas más altas desde que hace 62 años comenzó la serie histórica, solo por detrás de 2017 y 2003.
Las precipitaciones fueron, quizás, lo más destacable del mes de junio, en el que se ha recogido una media de 67 litros por metro cuadrado en todo el país. Se trata de una cifra que más que duplica el promedio, que se sitúa en 32 litros por metro cuadrado.
Este mes de junio ha sido el segundo más lluvioso del siglo XXI, sólo por detrás del de 2010 y es el cuarto junio con más precipitaciones de la serie histórica, que comenzó en 1961. Del Campo subraya que incluso en Canarias fue el junio más lluvioso con 17 litros por metro cuadrado, una cifra siete veces mayor de lo normal. A ese respecto, comenta que en Canarias en junio "suele llover muy poquito" y atribuye estas precipitaciones a la borrasca Óscar, que es "muy inusual" por estas fechas, y que dejó precipitaciones sobre todo en las islas occidentales.
Sin embargo, a pesar de que las precipitaciones fueron muy abundantes durante todo el mes, Del Campo explica que en muchos casos estuvieron asociadas a tormentas, de modo que al finalizar junio, "España en su conjunto se encontraba en situación de sequía meteorológica de larga duración".
En definitiva, confirma que la sequía "ni mucho menos ha terminado" y, aunque en general se han registrado "ligeras mejorías", todas las cuencas de acumulación de AEMET, que más o menos equivalen a las cuencas hidrográficas --pero no exactas-- seguían en situación de sequía meteorológica al terminar junio, con especial incidencia en Guadiana, Guadalquivir, sur de Andalucía, Ebro y Pirineo Oriental.