Podría parecer que no hay nada nuevo en un estudio que se publica este lunes en la revista Nature, pero la realidad es que casi todo es novedoso en este trabajo. Porque que los ancestros más antiguos de los humanos modernos -anatómicamente hablando-, los Homo sapiens sapiens, habían aparecido en África hace alrededor de 200.000 años es algo que se sabía hace tiempo.
Sin embargo, lleva tiempo debatiéndose en qué punto exacto se localizan esos ancestros y cómo fue el proceso de dispersión y eso es exactamente lo que parece haber dilucidado el trabajo dirigido por la profesora Vanessa Hayes, del Garvan Institute of Medical Research y la Universidad de Sidney y profesora extraordinaria de la Universidad de Pretoria.
El estudio ha concluido que fue un punto concreto de África del sur -la región de la cuenca del gran río Zambizi, que incluye un área extensa del norte de Bostwana, la que limita con Namibia en el oeste y Zimbabue al este- el lugar de origen del primer linaje materno del Homo sapiens sapiens.
Pero, al contrario que en otras ocasiones, estos hallazgos no se han basado en el análisis de fósiles sino en -y he ahí el otro punto novedoso del estudio- el del mitogenoma de los actuales habitantes de la región. "El ADN mitocondrial actúa como una cápsula del tiempo de nuestras madres ascentrales, acumulando lentamente los cambios durante varias generaciones. Comparando el mitogenoma de varios individuos se puede ver cómo están de relacionados", explica Hayes en un comunicado.
En el estudio, los investigadores recopilaron muestras sanguíneas para establecer un catálogo de los mitogenomas de los humanos modernos más antiguos, el llamado linaje L0. "Nuestro trabajo no hubiera sido posible sin las generosas contribuciones de las comunidades locales y los participantes de Namibia y Sudáfrica, que nos han permitido descubrir nuevas variables del L0", explica otra de las autores del estudio, la profesora Riana Bornman de la Universidad de Pretoria.
Los científicos han puesto así en el mapa el lugar de origen de estos primeros humanos modernos, pero el sitio actual se parece muy poco al que sirvió de cuna de la humanidad. Entonces, el lugar árido que es en la actualidad era la cuna de uno de los mayores sistemas de lagos de África, el lago Makgadikgadi.
En ese entorno, pudieron sobrevivir durante nada menos que 70.000 años. A partir de entonces, los primeros migrantes se aventuraron a colonizar el noreste de la zona y una segunda ola marcharon al sudoeste, mientras que una tercera parte se quedó en el lugar de origen.