Científicos estadounidenses han logrado reproducir en laboratorio una reacción de fusión similar a la que se produce en el sol, lo que se traduce en la generación de una ganacia de energia neta. Según anunciará mañana el Departamento de Energía de Estados Unidos y adelantan varios medios nacionales, es un hito que abre el camino a la "producción energética ilimitada, barata y limpia".
Se trata de una de las prioridades de la administración de Joe Biden, que ha impulsado desde su llegada al poder una línea que lleva desarrollándose décadas. La búsqueda de una energía que permita prescindir de los combustibles fósiles y no genere CO2, pero tampoco provoque residuos radiactivos como la nuclear y no dependa del clima como las renovables, ha recibido impulsos de inversión multimillonarios por los enormes beneficios que puede aportar a la economía y al bienestar.
Según publica el Financial Times, el Laboratorio Nacional Federal Lawrence Livermore en California ha utilizado un proceso denominado 'fusión por confinamiento inercial'. Consiste en bombardear una pequeña bola de plasma de hidrógeno con el láser más grande del mundo, lo que ha permitido obtener una ganancia neta de energía en un experimento de fusión en las últimas dos semanas.
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Esta es la principal clave del éxito del ensayo, según explican los físicos al diario: aunque ya se habían reproducido las reacciones de fusión en laboratorio, ningún experimento había logrado obtener más energía de la empleada en provocarla. Por lo tanto, no se producía 'ganancia neta' y la tecnología no se consideraba aptar para servir de alternativa a los métodos tradicionales de producción energética.
Los láseres de alta intensidad de la instalación NIF (National Ignition Facility) en el laboratorio Lawrence Livermore necesitan una maquinaria que ocupa más que un estadio de fútbol, y necesitan generar una energía de 2,1 megajulios, equivalente a más de dos millones de julios, para provocar la reacción. Sin embargo, al término del experimento, se habían producido 2,5 megajulios, un beneficio energético neto del 20% según confirma el Financial Times.
Según precisa el diario económico, la aplicación de este avance tiene décadas de desarrollo por delante, antes de que aparezcan las centrales eléctricas de fusión que desplacen a las actuales. Sin embargo, "el potencial de esta tecnología es difícil de ignorar", escriben en su editorial. Las reacciones de fusión no solo no emiten carbono o gases de efecto invernadero, sino que no dejan radiación de larga duración. Finalmente, y,en teoría, "una pequeña taza de combustible de hidrógeno podría alimentar una casa durante cientos de años".
"Es el Santo Grial de la energía libre de carbono que los científicos han estado persiguiendo desde la década de 1950", escribe por su parte The Washington Post. "Todavía falta al menos una década, tal vez más, para poder hacer un uso comercial, pero es probable que la administración Biden alcance su total desarrollo con nuevas inversiones masivas en los próximos años", señaló.
La crisis energética, en contexto
Según señalan los analistas, el anuncio de EEUU tiene un componente estratégico al realizarse en plena crisis energética, desencadenada por los altos precios de la energía a consecuencia de la invasión rusa de Ucrania. Asimismo, la COP27 ha recordado la urgencia de poner fin la quema de combustibles fósiles para frenar el aumento de las temperaturas globales.
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La administración Biden ha apostado por una inversión de 370.000 millones de dólares en nuevos subsidios para lograr energía baja en carbono. Esto posicionaría al país como líder tecnológico en la reducción de las emisiones, y se pondría en cabeza de la carrera mundial por la tecnología limpia de próxima generación, por delante de competidores como la Unión Europea o los países asiáticos.