Los residentes de Long Island, Bahamas, contemplaron un paisaje apocalíptico al abandonar sus casas una vez se levantaron las alertas por el paso del huracán Irma: el océano había desaparecido. Los vídeos grabados por los vecinos fueron compartiéndose en las redes sociales a lo largo del fin de semana: podía verse a la gente pasear por el lecho seco y recoger cangrejos muertos con la mano.
"Estoy perpleja" - tuiteaba Kaydi, una caribeña que ha difundido las impactantes imágenes. "¡El océano se ha ido! Esto es lo que pueden ver hasta donde alcanza la vista". El fenómeno se pudo observar horas después cuando Irma tocó tierra en Florida. En la localidad de Naples, punto de entrada del huracán, y en la bahía de Tampa se ha podido comprobar cómo las aguas se retiraban como en una catástrofe bíblica.
¿A dónde ha ido a parar el océano? La fuerza del huracán Irma es tal que modifica y desdibuja la línea de costa, secando algunas playas. Según explica Angela Fritz de The Washington Post, los vientos que han alcanzado 300km/h soplaron del sureste al noroeste a su paso por Bahamas. Al océano en Long Island, que está situada al noroeste, se lo llevó literalmente el viento.
Aunque Irma perdió potencia al alcanzar el continente, el fenómeno en Florida fue similar: en este caso los vientos soplaron del este y se llevaron el agua de la costa oeste. Hay otro factor que puede haber contribuido al fenómeno: el efecto de succión que se produce en el centro de la tormenta y que provoca que el agua se acumule en un punto.
En ese punto, explica Fritz, los vientos convergen al ser el punto de menor presión atmosférica, lo que se convierte en un "mecanismo de succión" que dada la potencia de Irma ha resultado ser excepcionalmente fuerte. Vía Reddit nos llega la demostración casera de este fenómeno:
Por último, es importante subrayar que se trata de un fenómeno benigno: ante el temor de un tsunami provocado por el regreso de las olas, el mar recuperó tranquilamente su nivel en las horas siguientes según los testigos.