Después de una primavera lluviosa todo el mundo tiene puesta su mirada en los próximos meses. ¿Viviremos un verano atípico? ¿Continuarán las lluvias en verano? ¿O por el contrario volveremos a sufrir largas e intensas olas de calor? El portal Eltiempo.es presenta un análisis de cómo se prevé este verano 2018.

Cerramos una primavera lluviosa

Marzo fue un mes muy frío en el que la temperatura media del país se quedó en solo 10ºC, convirtiéndose en el tercer mes de marzo más frío del siglo. Además, fue un mes especialmente lluvioso, y es que llovió un 347% más de lo habitual.

Abril fue un mes cálido, pero de nuevo lluvioso, con un 37% más de precipitación. Mayo ha sido un mes protagonista con las tormentas que han producido generosas lluvias en muchas zonas y complicaciones con inundaciones, caídas de rayos y granizo. Ha venido marcado por la entrada de sucesivas DANAs a nuestro país, algo que ha inestabilizado la situación en la mayor parte de España.

Y comenzamos un verano… no tan caluroso como otros

Las previsiones basadas en los principales modelos de predicción estacional indican que podríamos tener un verano no tan cálido como los últimos años. Las temperaturas podrían estar ligeramente (entre 0.5-1ºC) por encima de lo normal en el nordeste y algunas zonas del centro peninsular (Aragón, Cataluña, Navarra, La Rioja, País Vasco, norte de la Comunidad Valenciana, este de Castilla y León y Madrid).

En cambio, en el suroeste peninsular podrían estar por debajo de lo normal, así como en las Islas Canarias. En el resto, las temperaturas estarían dentro de lo normal. Esto no quiere decir que no vaya a hacer calor, sino que todo parece indicar que es probable que no se alcancen temperaturas extremas y de récord como en años anteriores.

¿Cuál es el motivo?

La causa de esta situación se encuentra en las aguas más frías de lo normal del Atlántico tropical, algo que no ocurría desde hace varios años, como en 1989 o 1994. Al encontrarse esta zona bajo un anticiclón bien posicionado se está produciendo una mayor evaporación, intensificándose el régimen de los vientos en la zona y permitiendo el afloramiento de aguas más profundas y frías.

Este verano será el más fresco de los últimos cuatro años.

Esto puede provocar que las intrusiones de masas de aire subtropical hacia España no sean tan cálidas como otros años, produciendo que las temperaturas no sean tan elevadas y que haya anomalías negativas en el sur peninsular. El hecho de que en el nordeste se tengan temperaturas ligeramente por encima de lo normal podría estar asociado a la influencia de altas presiones en el norte y este de Europa.

¿Continuarán las lluvias los próximos meses?

Todo parece indicar que las precipitaciones tenderían a estar por debajo de lo normal en el nordeste, posiblemente asociado a esa influencia de las altas presiones en la zona, y por encima de lo normal en zonas del norte y noroeste peninsular.

Debido a que los modelos muestran una tendencia a un patrón de presión dominante en el norte de Europa de un anticiclón bien anclado y otro sobre las Azores, la corriente el chorro es probable que se ondule en muchos momentos produciendo entradas de precipitaciones que podrían afectar a Galicia, Asturias, Cantabria, Castilla y León y, puntualmente, a la Comunidad de Madrid.

Menor probabilidad de incendios y fuertes olas de calor

La parte positiva de este pronóstico sería la menor probabilidad de tener intensas y largas olas de calor. El hecho de que las temperaturas se mantengan dentro de lo normal en muchas zonas o, incluso por debajo, también podría ayudar a que se tenga una menor probabilidad de incendios graves en España.

Noticias relacionadas