Un zoólogo en Roma afirma que como la crisis del coronavirus ha obligado a cerrar restaurantes y cafeterías en la capital de Italia, las gaviotas hambrientas han recurrido a la caza de roedores y palomas para compensar la falta de alimentos que antes dejaban los humanos en las concurridas calles de la capital. Sin los restos de comida que abandonan los turistas, las aves ha sido vistas en las últimas semanas atacando y comiendo animales vivos más de lo habitual.
"Los animales están cambiando sus hábitos a medida que nosotros cambiamos los nuestros", ha dicho el zoólogo Bruno Cignini al periódico italiano Corriere della Sera, "y han vuelto a ser depredadoras".
Según Cignini, que trabaja en la Universidad de Roma Tor Vergata, las gaviotas "están cazando principalmente palomas, pero también otras aves que están a su alcance, como vencejos y mirlos. También buscan peces en el río Tíber y pequeños roedores. Por suerte, incluso come ratones".
Si bien la forma de actuar de las gaviotas puede resultar impactante para algunos vecinos, no es inusual que estas aves se coman animales vivos o muertos, o que cacen animales para su consumo. Se sabe que las gaviotas se alimentan casi cualquier cosa y, ante esta situación de confinamiento, adaptarán su alimentación según lo que tengan más disponible.
Es posible que la cuarentena de la población haya empujado a más gaviotas a alimentarse de palomas y ratas a medida que han ido desapareciendo los restos de comida que dejan los turistas, pero también es posible que simplemente este comportamiento se haya vuelto más evidente al estar las calles vacías y que pase ahora menos desapercibido.
"Es el período de anidación, por lo tanto, frecuentan principalmente el lugar donde se reproducen", agrega Bruno Cignini, "siempre están donde están las crías que en estos meses comienzan a nacer, también porque temen a otros depredadores como los cuervos".
La población de gaviotas en Roma ha experimentado un verdadero auge en los últimos años, lo que llevó al ex viceprimer ministro, Matteo Salvini, a bromear acerca de que estas aves eran "del tamaño de pterodáctilos" durante una discusión en Twitter con la alcaldesa de Roma, Virginia Raggi.
Mientras tanto, se cree que los problemas actuales con la recolección y el procesamiento de la basura en la ciudad han causado un auge similar en la población de roedores en los últimos años.
Ante la caída de la mortalidad de personas afectadas por COVID-19, Italia empezó la semana pasada a relajar las medidas de confinamiento de la población que comenzaron el pasado marzo, solo unos días antes de que se decretara el estado de alarma en España. La semana pasado volvieron al trabajo la industria y los sectores textil, de construcción y mayoristas.