La 'nueva normalidad' climática puede llevarnos a paradojas como la de acoger temperaturas por encima de los 35 ºC como "un alivio". Pero es precisamente lo que va a ocurrir en la primera semana de julio de 2019: con un calor por encima de la media y más propio de comienzos de agosto en numerosos puntos de España, el termómetro seguirá siendo más tolerable de lo experimentado en la primera gran ola de calor del año. Ha sido relativamente breve, del jueves 27 al domingo 30, pero han bastado cuatro días para permitirle entrar en la historia.
La situación ha estado marcada por dos importantes fenómenos: al oeste, bajas presiones en la zona del Atlántico que han mantenido a Galicia, Asturias y zonas del Cantábrico al resguardo mediante la entrada de aire frío, nubosidad y precipitaciones. En contraposición, el resto de la Península y Baleares se han visto bajo el influjo de una dorsal de altas presiones que ha penetrado profundamente en dirección norte hasta el centro de Europa. Ha traído aire cálido continental africano al que las condiciones anticiclónicas sobre el continente y las abundantes horas de sol han terminado por sumarse para producir un calentamiento excepcional.
Así, mientras las Islas Canarias, Ceuta y Melilla han quedado al margen del episodio, el impacto de la ola de calor ha sido en general más fuerte cuanto más al noreste nos desplazamos, con el epicentro de la alerta en el valle del Ebro. Pero no solo: en pleno centro peninsular o hasta el sur, en Granada, también se han batido récords de calor no solo para un mes de junio, sino que, en ocasiones, han sido las temperaturas más altas jamás registradas ahí. Sin embargo, es más al norte, en el sur de Francia, donde se han superado los 45 ºC, un calor nunca visto en el país.
La severidad del episodio queda a la vista en el gráfico anterior: del viernes al domingo se han producido los tres días más cálidos registrados para un mes de junio no solo en el cuadrante noreste de la Península Ibérica, sino en la práctica totalidad de Francia, Suiza y Centroeuropa, la mitad norte de Italia, partes de los Países Bajos y Alemania, y más al norte, Polonia, Bielorrusia y Lituania. Para España, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha hecho públicos los récords registrados en las estaciones de su red principal para este fin de semana en los infiernos.
Así, el viernes 28 de junio se batían las marcas de temperaturas más altas jamás registras en dos insignes plazas: por un lado, en la estación del Retiro, en pleno corazón de Madrid, que alcanzaba los 40,7ºC; por el otro, en la ciudad de Lleida, con 43,1 ºC. Hubo otros dos récords absolutos tanto en la Comunidad de Madrid como en Cataluña, ambos registrados en aeródromos: Torrejón de Ardoz con 41,9 ºC y Girona-Aeropuerto con 43 ºC.
Las temperaturas más altas para un mes de junio se dieron en lugares como Ciudad Real, con 42,7 ºC; el aeropuerto de Granada, con 42,6 ºC y el de Logroño, con 41,1 ºC. De vuelta a las ciudades, Toledo marcó 41,7 ºC y Tortosa, en Tarragona, 41,4 grados; y al sur de Madrid, Getafe con 41 ºC. Pero el top no estuvo únicamente en las magnitudes superiores a los 40 grados: Valladolid con 39,8 ºC, Salamanca con 39,4 ºC y Zamora con 39,1 ºC. Del viernes al sábado, Molina de Aragón (Castilla-La Mancha) con 36,9-37,8 ºC y Ávila con 35-36,9 ºC rebasan todos los registros hasta la fecha para este mes.
El sábado 29 nos depara tres récords absolutos significativos. Primero, el de Calamocha (Teruel) con 39,5 ºC, un pico aún más llamativo teniendo en cuenta que esta localidad forma con la anteriormente mencionada Molina y la propia Teruel el 'triángulo del hielo' de la zona más fría de España. La segunda máxima es la del Puerto de Navacerrada en Madrid, en plena montaña, que alcanza por primera vez los 32 grados. Y el tercero es de nuevo para Lleida, que rebasa su propia marca histórica batida 24 horas antes poniéndose en 43,4 ºC.
Otras cifras notables de este episodio son los 43,2 grados en el aeropuerto de Zaragoza, los 41,3 ºC en el de Pamplona, los 41,2 en el de Huesca, los 41,1 en el de Madrid y los 39,7 ºC en la estación de Foronda-Txokiza (Álava). Ya el domingo 30, todavía hay un dato destacable en Daroca (Zaragoza) con 40,5 ºC. Cierran el podio Ávila y Segovia, pero por las temperaturas mínimas más altas medidas nunca: noches a 23,1 ºC y 25,9 ºC, respectivamente.