El calor llegará a su máximo este martes, sin embargo las altas temperaturas nos acompañarán en lo que resta de semana. Además, los termómetros irán bajando y aumentará la inestabilidad en las próximas jornadas con la aparición de tormentas por las tardes, según informa eltiempo.es.
Este miércoles las máximas descenderán ligeramente en el oeste y el centro del país mientras que en el área mediterránea podrían continuar subiendo. Los avisos por calor ya están previstos en puntos de Andalucía (40ºC), Extremadura (38ºC) y Aragón (36ºC), aunque en amplias zonas del mapa se superarán los 33-34 grados de máxima.
Se espera que aumente la inestabilidad en la mitad norte de la península por la tarde. La parte delantera de una vaguada de aire algo más frío en altura propiciará tormentas por la tarde que pueden tener un importante aparato eléctrico y dejar precipitaciones en forma de granizo.
Estas tormentas también pueden venir acompañadas de importantes rachas de viento, por las que ya están previstos los avisos en amplias zonas, siendo los avisos por tormenta de nivel naranja en el interior noroeste, donde también están previstos por precipitaciones intensas.
El jueves las máximas tendrán un descenso más marcado en la mitad oeste de la península, mientras que en el este se mantendrán similar. Las mínimas se mantendrán sin grandes cambios por lo que seguirá el calor nocturno en amplias zonas en las que los termómetros no bajarán de los 20 grados, considerándose noches tropicales.
El viernes las temperaturas podrían descender de forma más generalizada en España, produciéndose así un alivio del fuerte calor. Las máximas quedarían por debajo de los 35 grados incluso en las zonas más calurosas, aunque la tendencia es que a lo largo del fin de semana los termómetros vayan poco a poco de nuevo en ascenso.
¿Primera ola de calor del verano?
El criterio de 'ola de calor' en España es bastante estricto. Se considera que se da este fenómeno cuando durante 3 días consecutivos, en al menos el 10% de las estaciones meteorológicas, se registran temperaturas por encima del percentil 95 de las máximas de la climatología de julio y agosto, que son normalmente los meses más calurosos del año.
Este criterio no se cumple fácilmente, las temperaturas tienen que ser muy extremas (dentro del 5% de los días más cálidos de esos meses del verano según la climatología) y ocurrir en una zona considerable del territorio durante varios días seguidos.
Aunque solo a posteriori se puede determinar si ha sido una "ola de calor" lo cierto es que muchos de estos episodios se consideran solamente "episodios de altas temperaturas" por no cumplir los requisitos de extensión, duración o temperatura umbral.
Calor sevillano en Siberia
Estos días en Siberia se han registrado temperaturas diurnas tan altas como las de Sevilla (38ºC), donde además también está haciendo más calor de lo normal para esta época del año.
Desde Canadá, pasando por Groenlandia, hasta Siberia, las temperaturas son cada vez más altas y ya no es de extrañar que registren valores propios de latitudes inferiores.
Siberia es uno de los lugares donde las temperaturas son más bajas en todo el mundo, registrando en esta zona el récord de temperatura más baja a nivel mundial en un lugar habitado en Oymyakon (– 72.2ºC).
Sin embargo, en las últimas semanas, gran parte de Siberia aparecía en los mapas de temperaturas globales con una gran mancha roja encima por sus valores térmicos extremos, mucho más altos de lo habitual (hasta 30ºC por encima de lo normal para esta época).
Esta semana, en Verjoyansk, una localidad similar a Oymyakon en cuanto a temperaturas, el mercurio ha llegado a marcar los 38ºC.
Las temperaturas elevadas, entre otras cosas, están provocado un devastador derrame de petróleo y la propagación de grandes e inusuales incendios forestales en esta zona.
Una amplia extensión del territorio ruso se sitúa dentro del círculo polar ártico. Muchas ciudades han sido construidas sobre suelo helado, el conocido permafrost, y si comienza a descongelarse, las consecuencias podrían ser devastadoras para millones de habitantes.