El cambio de temperatura que se ha vivido este fin de semana en algunos puntos de la Península por el paso de un frente que ha dejado chubascos ha sido cuestión de visto y no visto, como suele decirse. Tal y como advierte la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), el calor extremo que se había apoderado de buena parte de España —a excepción, eso sí, de estos dos últimos días— volverá a imponerse con temperaturas más propias de las fechas de verano.
Para los primeros días de esta semana se espera que la dorsal anticiclónica cobre fuerza nuevamente sobre el suroeste europeo, por lo que las temperaturas ascenderán de manera considerable desde este mismo lunes. Una situación que se verá favorecida, sin duda, por la ausencia de nubosidad.
Aun así, no se puede decir que las temperaturas serán las mismas que dejamos antes del fin de semana, pues se producirá una baja que se situará en pleno Atlántico y que ayudará las masas de aire cálido de origen africano migren algo más al norte y fortalezcan la dorsal en todos los niveles. Por tanto, se espera que las temperaturas sigan ascendiendo hasta llegar a unos valores que —ahora sí— serán excepcionales para este periodo del año.
En el sur de la Península será donde más se note esta excepcional subida de temperaturas. Así, está previsto que las temperaturas máximas superen los 30 ºC en la mitad sur, de forma generalizada. Tampoco se descarta que de forma local en el norte encontramos estas temperaturas, manteniéndose en torno a los récords cálidos del mes de abril en amplias regiones.
La temperatura máxima prevista
Teniendo en cuenta todos estos factores, las previsiones apuntan a que las máximas podrían alcanzar valores de entre 35 y 38 ºC en las zonas más cálidas en las que la ausencia de nubosidad así lo permita. Por ejemplo, en el Valle del Guadalquivir no se descarta que se produzcan estas temperaturas que en años anteriores hubiéramos tenido que esperar hasta los meses de junio y julio para experimentarlas.
"Si finalmente se acaba cumpliendo lo que a día de hoy ven los mapas, sin duda alguna estaríamos ante un episodio histórico", explica el meteorólogo Samuel Biener en su previsión para Meteored. En otros puntos de Castilla-La Mancha, Extremadura y el valle del Ebro podrían superar la marca de los 30 ºC con facilidad a mediados de semana, con una subida más alta a partir del jueves.
Por otro lado, en gran parte de la Península la temperatura de la masa de aire superará los 20 ºC, mientras que en la mitad sur será de 22 ºC. Pese a que no sean unos valores comparables con los que se darán en algunas regiones del sur, seguirán siendo temperaturas que están ligeramente por encima de la media del mes de julio. De todos modos, no hay ninguna duda de que veremos entonces temperaturas propias de meses estivales en abril.
Y aunque todavía sea pronto como para conocer con exactitud la previsión del final de la semana, los expertos barajan dos posibilidades. Desde que se mantenga este episodio de calor anómalo hasta que las temperaturas se suavicen en la mitad occidental por los restos de algún frente desde al Atlántico. Aun así, si se produjera este último escenario, los valores seguirían estando muy por encima de los normales.