Ya se venía advirtiendo desde principios de julio. La segunda ola de calor del verano ha llegado. Tras un fin de semana de temperaturas más elevadas de lo normal, la Agencia Española de Meteorología (Aemet) avisa de que los días más álgidos de este episodio tendrán lugar entre el lunes 10 y el martes 11 de julio, manteniéndose al menos hasta el miércoles 12.
La culpable de esta segunda ola de calor es una dorsal de aire caliente y seco originada en el Sáhara. Según informa la Aemet, esta columna se situaba este fin de semana en el este de la Península, en el entorno de Túnez, desde donde ha impulsado "un flujo de componente sur en la mitad oriental peninsular y Baleares".
En estos días, se espera que la dorsal se vaya desplazando hacia el oeste, por lo que la masa de aire afectará a gran parte del país La Aemet, de hecho, ya ha puesto varias zonas en alerta roja.
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Una de las regiones más críticas es Andalucía, donde se espera que áreas de Córdoba y Jaén lleguen hasta los 44 grados, por lo que se ha activado el riesgo máximo. Las zonas más críticas son la campiña cordobesa, Morena, Condado, Cazorla, Segura y valle del Guadalquivir de Jaén. Mientras, en Cádiz, Granada, Málaga y Sevilla hay aviso naranja por valores entre los 41 y los 43 grados.
Avisos naranjas y amarillos
Todas las provincias de Castilla-La Mancha comparten la alerta naranja, pues se espera que alcancen valores entre los 38 y los 42 grados. Además, en puntos de la serranía conquense hay aviso amarillo por tormentas.
La Comunidad de Madrid es otro de los territorios afectados, imponiéndose una alerta naranja en puntos del área metropolitana, sur, Henares, las vegas y el oeste. Se espera que estas zonas lleguen hasta los 40 grados. En Aranjuez y alrededores se advierte que incluso se pueden alcanzar los 42 grados.
Baleares es el último territorio con una alerta de riesgo alta. Se ha interpuesto en Mallorca, donde se espera que las temperaturas máximas lleguen, puntualmente, hasta los 39 grados.
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En Extremadura, los termómetros oscilarán entre los 39 y 40 grados en toda la comunidad, sobre todo en las vegas del Guadiana, siberia extremeña, Barros, Serena, Tajo, Alagón, Villuercas y Montánchez. Mientras, en Aragón, Castilla y León, Cataluña, Murcia, Navarra, La Rioja y la Comunidad Valenciana hay aviso amarillo por máximas que oscilarán entre los 34 y los 39 grados.
A partir del martes, las temperaturas podrían bajar en zonas del norte peninsular, aunque el calor se puede intensificar en el tercio oriental y en las islas Baleares. El miércoles, el descenso térmico se irá dejando notar en algunas zonas, aunque como informan desde eltiempo.es "con mucha incertidumbre en su alcance e intensidad". De hecho, según los modelos, ese día podría comenzar un ascenso de las temperaturas en las islas Canarias, provocando un "calor extremo" en medianías del archipiélago.
Noches tropicales
La ola de calor no sólo viene acompañada de altas temperaturas durante el día. Se tendrán noches tropicales sin bajar de los 20ºC en gran parte de la mitad sur peninsular y el mediterráneo. Los expertos advierten que el martes las mínimas podrían resultar mucho más altas, especialmente en puntos de Castilla-La Mancha, Andalucía, el interior de Cataluña y la costa mediterránea. Se pronostica que, incluso, podrían no bajar de los 25ºC.
No todo son alertas para España. El norte peninsular permanece fuerte frente a este episodio de calor y se habla de lluvia. Concretamente, se esperan algunos chubascos en el Cantábrico y zonas de montaña del tercio norte peninsular. Acercándose al fin de semana, pueden sucederse algunas tormentas en zonas de montaña del interior peninsular.
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Que se cumpla o no este panorama infernal depende de la dorsal, ya que viene acompañada de polvo en suspensión. La calima, como explican desde la Aemet, suele actuar a modo de paraguas y rebaja el calor. El viento en superficie también puede contribuir a templar el ambiente. Habrá que esperar pues para ver si se bate el récord nacional de temperatura, aunque los expertos creen que la zona del alto Guadalquivir entre Córdoba y Jaén seguramente lo harán.
Será a partir del miércoles 12 cuando comience un refrescamiento en la mitad norte y centro peninsular. Según detalla el organismo experto, se dejará notar principalmente en el valle del Ebro. Si bien, tal y como han difundido en su comunicado, "en estos momentos no es posible establecer con certeza el fin de este episodio de ola de calor. El escenario más probable indica una tendencia a que continúen los descensos térmicos, aunque todavía durante varios días más, las temperaturas estarán por encima de los valores habituales en zonas de la mitad sur peninsular y Baleares".