El episodio de calor anómalo que ha marcado el ecuador de noviembre, con valores de 27 grados en Andalucía y hasta 30 grados en Canarias, termina desde este lunes con la llegada de una masa de aire polar a la península. Esta entrada propiciará un acusado descenso térmico en casi todo el país, de incluso diez grados centígrados de diferencia entre un día y otro, con las primeras heladas generalizadas y nevadas tanto en el norte como en las Baleares.
La bajada de las temperaturas se nota desde las primeras horas de la mañana, adelanta Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) A partir del miércoles entrará viento procedente del interior de Europa, por lo que la masa de aire que de momento es marítima adquirirá un carácter más continental. "Esta advección polar tendrá lugar en el Mediterráneo central por lo que en la mitad este peninsular será donde más se noten sus efectos", añade Duncan Wingen, de Meteored.
Así, en muchos puntos de España, los termómetros se situarán entre 8 y 10 grados por debajo de los registrados el domingo, con temperaturas ya normales para estas fechas o incluso algo inferiores en puntos de la mitad norte. Además, según avisa el portavoz, "el viento acrecentará la sensación de frío".
Por el contrario, apenas habrá precipitaciones, salvo en las comunidades Cantábricas y Pirineos -donde las lluvias y nevadas serán más significativas- y en el norte de Cataluña y en las Baleares. Este lunes será un "día de transición" con vientos del norte y noroeste y alguna lluvia en el extremo norte peninsular. Habrá nubes bajas y nieblas persistentes en amplios puntos del país, sobre todo en la meseta norte, donde hay aviso por densas nieblas con baja visibilidad.
A partir de mañana martes, la bajada será especialmente intensa en el interior oriental peninsular, con hasta 8 grados menos con respecto al día anterior. Las lluvias afectarán a las Comunidades Cantábricas, Pirineos, entorno de los sistemas Ibérico y Central, y también al norte y este de Cataluña y en Baleares, con una cota de nieve de unos 1.400 metros.
Los vientos del norte se esperan "intensos" y acrecentarán la baja sensación térmica. Las máximas solo superarán los 20 grados en el sur de Andalucía y puntos del sureste, mientras que en zonas de montaña no se llegará a 10 grados. "La tramontana dejará rachas muy fuertes de viento a partir del martes. Se podrán superar los 70-80 km/h en el Ampurdán, Tarragona, valle del Ebro, norte de Baleares y en zonas de montaña", añade Wingen.
El miércoles, las máximas no variarán demasiado, pero las nocturnas seguirán en descenso. Se esperan heladas en zonas de montaña y en paramos del interior, y nevadas en el extremo norte, aunque con tendencia a remitir. La cota de nieve se desplomará en Los Pirineos hasta unos 600 a 800 metros.
A lo largo del jueves la situación se irá estabilizando, con apenas algunas lluvias en España, pero las nocturnas seguirán en descenso y las heladas se extenderán por el interior oriental peninsular. Teruel podría bajar hasta 5 grados bajo cero y Segovia, Cuenca o Ávila marcarían 0 grados.
A partir del viernes y durante fin de semana, se repetirán las heladas nocturnas, aunque con una tendencia a que suban las temperaturas en este tramo final de la semana, y sin lluvias significativas.