Sólo queda una semana para decir adiós a la canícula, el período del año en el que suelen darse las temperaturas más altas. Sin embargo, España se adentra en esta recta final con una nueva ola de calor: desde este viernes y posiblemente hasta el domingo, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha advertido que las temperaturas en buena parte de nuestro país van a ser sofocantes. Podremos ver durante el fin de semana termómetros que alcanzan los 42ºC por el día y hasta 25ºC por la noche.

"La actual situación de estabilidad atmosférica, con cielos poco nubosos, elevada insolación y vientos flojos, tenderá a mantenerse y reforzarse en los próximos días, especialmente a partir del viernes con el desarrollo de una dorsal en niveles medios", explica la Aemet. "Por este motivo se espera que las temperaturas ya elevadas, continúen ascendiendo progresivamente en las próximas jornadas, favorecidas por el viento del sur y sureste, alcanzando valores de peligro importantes".

Los episodios de altas temperaturas son considerados ola de calor cuando superan un alto grado de intensidad, pero también de duración y de extensión en el territorio. Tal y como explica la Aemet, debe durar al menos tres días y afectar, por lo menos, a un 10% de todas las estaciones meteorológicas de nuestro país. Durante este tiempo y espacio "las temperaturas máximas diarias deben superar el 5% de los días más cálidos registrados en julio y agosto en el período 1971-2000", según explica Eltiempo.es.

VÍDEO | La Aemet avisa de una nueva ola de calor, con temperaturas que superarán los 40º en algunas zonas

Viene lo peor el sábado

La Aemet ya ha adelantado que en esta ola de calor las principales áreas afectadas serán los valles de los grandes ríos y las depresiones del nordeste. Aunque este jueves ya se han podido sentir subidas de temperatura en el tercio norte, será a partir del viernes y también durante el sábado cuando se den los ascensos generalizados. De esta manera, el viernes encontraremos termómetros a 39ºC en el medio Ebro, depresiones de Huesca y Lleida, valle del Guadalquivir, Granada y puntos del centro peninsular y valles del Duero y del Miño.

En los valles del Tajo, Guadiana y alto Guadalquivir se podrían llegar a alcanzar los 40ºC durante la jornada del viernes. En total, la Aemet ha lanzado avisos a once comunidades autónomas para este día y siete de ellas están en alerta naranja: Andalucía, Aragón, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Cataluña, Extremadura y Comunidad de Madrid. Sin embargo, la Aemet ya ha avanzado que el plato fuerte de esta ola de calor tendrá lugar durante el sábado, cuando se consolidará esa subida general de la temperatura.

"Es posible que se superen los 40ºC de forma generalizada en los valles del Ebro, Tajo, Guadiana y Guadalquivir; los 38-39ºC en los valles del Duero y Miño, centro peninsular, oeste de la meseta Sur y cuenca del Genil. Además, es probable que se superen los 34ºC en el oeste de Galicia y los 36ºC en el resto de la meseta Norte, interior de Cataluña, norte de la Comunidad Valenciana y sur de Baleares". Durante la jornada del sábado los avisos por calor ascienden a un total de trece comunidades autónomas.

A partir del domingo

De ellas, hasta diez alcanzarán alertas de color naranja: Andalucía, Aragón, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Cataluña, Extremadura, Galicia y Comunidad de Madrid Comunidad Foral de Navarra y La Rioja. Ahora bien, la Aemet pronostica que para el domingo es muy probable que el avance del calor se detenga. "Es muy probable que comience a entrar una masa atlántica, más fresca, por el tercio occidental peninsular, produciendo un descenso térmico moderado pero sólo en esta zona", explica el organismo estatal.

Sin embargo, el área cantábrica seguirá experimentando ascensos de temperatura debido al viento del sur. De hecho, se esperan 40ºC en la zona del Cantábrico oriental y en los valles del Ebro, Tajo, Guadiana y Guadalquivir e, incluso, 42ºC en el litoral vasco y el valle del Ebro. La temperatura oscilará entre los 38ºC y los 39ºC durante el domingo en el valle del Duero, el centro peninsular y la meseta sur. El resto del territorio, menos las zonas del litoral, se espera que la temperatura máxima sea de 36ºC.

La Aemet también destaca las altas temperaturas que tendrán lugar por la noche entre el viernes y el domingo. Noches entre los 22ºC y los 25ºC en las que será difícil pegar ojo sobre todo en los valles y en el Cantábrico oriental el domingo. "Durante el fin de semana habrá un incremento de la inestabilidad atmosférica y aumentará la probabilidad de tormentas principalmente en el entorno de la cordillera Cantábrica, sistema Ibérico y Pirineos. Dada la escasa humedad es probable que las tormentas consistan básicamente en actividad eléctrica y rachas fuertes o muy fuertes de viento", resume Aemet.

La ola de calor podría llegar oficialmente a su fin el próximo lunes, cuando la masa de aire atlántico se adentre en la península. Si bien se espera que todavía la sensación sea calurosa, estos niveles no podrían ser considerados como ola de calor.