Éstos son los mejores filetes de pollo envasados del 'súper', según la OCU
La Organización de Consumidores y Usuarios ha analizado distintas preparaciones de pollo envasadas que se venden en los establecimientos españoles.
5 marzo, 2020 04:00Noticias relacionadas
El pollo es una de las carnes preferidas por los españoles. Según el último Informe del Consumo Alimentario en España, elaborado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en nuestro país tomamos alrededor de 12,5 kilos de pollo al año frente a los 10,2 kilos de carne de cerdo y los 5,19 kilos de vacuno. Las propiedades nutricionales de esta carne blanca, donde destaca tanto el aporte de proteínas como su bajo contenido en grasas —además de su bajo precio— hacen de ella una de las opciones más demandadas del supermercado. Pero ojo, porque no es lo mismo un filete fresco de pollo que algunas de las preparaciones envasadas que encontramos en las estanterías.
Un panel de expertos de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha realizado un análisis de las bandejas de filetes de pollo de los supermercados españoles y ha seleccionado la mejor en base a distintos criterios: porcentaje de proteínas, relación entre proteínas y agua, presencia de almidones, fibra y azúcares, contenido en sal, presencia de aditivos, higiene y etiquetado. El resultado de este estudio ha determinado que la mejor bandeja del supermercado es la del solomillo de pollo fileteado estilo persian de Sertina.
Este producto en adobo, que contiene un 92% con carne de pollo, obtiene la máxima puntuación de los expertos en los apartados de cantidad de proteína (22 gramos por cada 100 gramos), en la proporción de agua, la cantidad de fibra y en el apartado de aditivos. Los especialistas que han analizado las distintas marcas también le otorgan la máxima puntuación en el apartado nutricional y señalan que tiene un contenido medio de grasas (4,8 gramos) y de sal (0,63 gramos). Su precio asciende a los 12,90 euros/kilo.
El solomillo de pollo envasado de Sertina ha obtenido una mejor puntuación que la pechuga fileteada a las finas hierbas de Dia y que la pechuga de pollo al ajillo de Lidl, que han conseguido la segunda y tercera mejor valoración de todas las marcas analizadas por la OCU. Por debajo de estos dos productos se encuentran el solomillo de pollo marinado andaluz de Emcesa y la pechuga finas hierbas marinada de Mercadona.
Pollo procesado
Conviene señalar que, tal y como explica la OCU, existe una importante diferencia entre las distintas bandejas de filetes de pollo que podemos encontrar en los establecimientos. En concreto, se pueden diferenciar dos variedades fundamentales. La primera es la de filetes frescos: aquellos que han sido mínimamente procesados y que no han recibido ningún tratamiento salvo el golpe de frío previo al corte con la máquina y el envasado. En teoría, estos tienen un mayor porcentaje de carne y una menor cantidad de agua.
La segunda variedad son los filetes procesados de pollo (es decir, en adobo, marinados, a las finas hierbas o al ajillo). En esta categoría entrarían los que copan las primeras posiciones del ránking de la OCU. "No son lo mismo que los filetes frescos, se trata de productos mucho más procesados, llevan en primer lugar agua añadida y luego una serie de ingredientes y aditivos destinados a retener esa agua dentro del filete", señala la OCU.
Dentro de estos podemos distinguir los preparados de carne (filetes procesados que mantienen la estructura de fibras de la carne y pueden incluir una lista larga de aditivos) y los productos cárnicos (la estructura de las fibras musculares está alterada y admiten menos aditivos aunque más conservantes).
De esta forma, la Organización de Consumidores y Usuarios recomienda fijarse muy bien en la etiqueta para saber qué estamos comprando. "Al igual que los preparados de carne picada no sólo tienen carne picada sino que incluyen una serie de ingredientes y aditivos, los filetes marinado elaborados de pollo y pavo son preparados o productos cárnicos con agua añadida y diferentes ingredientes y aditivos", señala el organismo. "No son carne fresca y el porcentaje de pollo y pavo apenas supone el 80-85% en la mayoría de ellas. El resto son otros ingredientes que vas a pagar a precio de carne, porque estos productos no son más baratos que el pavo y el pollo frescos sin tratar", finaliza.