Junto a la propagación de la enfermedad COVID-19, causada por el virus SARS-CoV-2, cuyos primeros contagios datan de diciembre de 2019 en la provincia de Wuhan, en China, también se han extendido de forma paralela multitud de bulos en las redes sociales sobre remedios caseros para atajar la enfermedad.
Entre tantos ejemplos, hay un bulo que señala que un "sabio médico chino" sugirió que el ajo hervido en agua tiene el potencial de mejorar y curar la enfermedad en tan solo una noche. Según esta receta, bastaría con tomar ocho dientes de ajo picados junto a siete tazas de agua hervida.
Después, ¡magia!, en un solo día todos los males secundarios al coronavirus desaparecerían. Sin embargo, lo cierto es que ningún alimento es capaz de curar por sí solo ni esta enfermedad ni ninguna otra infección bacteriana, vírica o fúngica.
Si bien es cierto que algunos estudios sugieren que el ajo, entre otros alimentos como determinadas especias, posee cierto potencial bactericida, esto no significa que consumirlo en su forma cruda haya demostrado tal potencial. De hecho, la evidencia respecto a dicho potencial es bastante escueta.
Sin evidencia
Por ello, la Organización Mundial de la Salud ha abordado específicamente este rumor, señalando que si bien el ajo es un alimento saludable y posee propiedades antimicrobianas, no hay evidencia de que comer ajo proteja a nadie respecto a la infección por el nuevo coronavirus.
Así mismo, la OMS lleva semanas recopilando este y otros bulos respecto al coronavirus en su portal web, tales como los supuestos efectos del virus o el calor contra el virus, o su supuesta transmisión a través de mosquitos, entre muchos otros.
Este tipo de remedios naturales no es dañino siempre que no se dejen de seguir los consejos médicos basados en la evidencia. En general, comer una cantidad suficiente de frutas y verduras, junto a una cantidad de agua adecuada, puede mejorar gratamente la salud de cualquier individuo. Sin embargo, no existe ningún alimento que pueda ayudar a compartir ningún virus conocido.
Una situación similar suele producirse año tras año con la gripe. Se suele informar sobre "superalimentos" capaces de mejorar la sintomatología o incluso curar la gripe, como el jengibre, el té o incluso el mencionado ajo. En estos casos, hay estudios que sugieren ciertas propiedades analgésicas y antimicrobianas, como repasamos en EL ESPAÑOL.