De los macarrones al pan blanco: el último beneficio de restringir los hidratos de carbono
Un nuevo estudio ha observado mejoras en la composición corporal y en la salud metabólica con dietas de ocho semanas.
22 agosto, 2020 00:53Noticias relacionadas
Un nuevo estudio de investigadores de la Universidad de Alabama en el Centro de Investigación de Nutrición y Obesidad de Birmingham (Estados Unidos) ha observado mejoras en la composición corporal, la distribución de la grasa y la salud metabólica en respuesta a una dieta de ocho semanas con muy pocos carbohidratos.
Los adultos mayores con obesidad corren un riesgo particularmente alto de desarrollar enfermedades cardiometabólicas como la diabetes de tipo 2 y enfermedades cardiovasculares. En lugar de la masa grasa total, la deposición de grasa en ciertas áreas, como la cavidad abdominal y el músculo esquelético, puede conferir este mayor riesgo de desarrollo de la enfermedad.
"Tras la intervención de ocho semanas, a pesar de la recomendación de consumir una dieta de mantenimiento del peso, el grupo que consumió la dieta muy baja en carbohidratos perdió más peso y masa grasa total que el grupo de la dieta de control", explica la líder del estudio, Amy Goss. El consumo de huevos fue una parte importante de la prescripción de esta dieta. Goss y su equipo proporcionaron huevos a los participantes de este grupo de dieta y les pidieron que consumieran al menos tres por día.
"Aunque los huevos formaron parte de este estudio, no podemos concluir que nuestros hallazgos son el resultado del consumo diario de huevos; pero creo que lo que sí podemos concluir es que los huevos enteros pueden ser incorporados a la dieta de manera saludable sin afectar de manera adversa el colesterol en la sangre de los adultos mayores", resalta.
La principal diferencia en la pérdida de grasa entre los dos grupos fue la de la cavidad abdominal y los depósitos de músculo esquelético. "También encontramos mejoras significativas en el perfil general de lípidos que reflejaría un menor riesgo de enfermedad cardiovascular. Además, la sensibilidad a la insulina mejoró en respuesta a la dieta muy baja en carbohidratos, lo que refleja un menor riesgo de diabetes tipo 2". En general, observamos mejoras en la composición corporal, la distribución de la grasa y la salud metabólica en respuesta a una dieta de ocho semanas muy baja en carbohidratos", apunta la investigadora.