Por su elevado contenido en azúcares y grasas saturadas, los chocolates a la taza que se pueden comprar envasados en el supermercado se recomiendan únicamente para un consumo ocasional. Del mismo modo, la única tableta de chocolate que se podría considerar adecuada para tomar es la que contiene al menos un 70% de cacao. El chocolate blanco está en extremo opuesto de la lista porque está elaborado con manteca extraída del cacao, su parte más grasa y menos saludable.
Si juntamos ambos factores, chocolate soluble y blanco, obtenemos un producto que no solo no es sano, sino que directamente es 'fake', como denunciaba hace un año la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). El producto, 'Paladín blanco', no lleva la palabra 'chocolate' en el nombre pero sí promete un "excelente sabor a chocolate blanco", y mostraba la imagen de unas onzas de este tipo de tableta.
Esto era engañoso, denunciaba la organización, porque "el chocolate blanco es solo la manteca de cacao y para la preparación de chocolates instantáneos se usa cacao desgrasado, y Paladín Blanco no cumple ninguna de estas condiciones. Lo único que tiene de chocolate blanco instantáneo es el aroma". La OCU aseguraba que se había puesto en contacto con el fabricante para que rectificase esos puntos.
Ahora, la organización comunica que el grupo productor, Idilia Foods, ha acogido favorablemente sus recomendaciones y ha cambiado tanto el etiquetado como la composición del producto. "Ya está a la venta el nuevo Paladín chocolate blanco instantáneo, que ahora es un producto con un etiquetado efectivamente mejorado". Por un lado, se han eliminado, junto al reclamo "nuevo", las imágenes de onzas de chocolate blanco del envase. Por el otro, se ha modificado la composición, incorporando un 2,5% de chocolate blanco.
Aunque ahora el producto se corresponde mejor con lo anunciado, desde la OCU subrayan que la cantidad añadida de chocolate blanco "es muy baja". Como resaltan, "quien lo consuma debe tener presente que este es un producto ultraprocesado, que en realidad no es chocolate, sino un preparado para bebida de sabor chocolate blanco".
El principal ingrediente que encontraríamos en 100 g de este producto sería el azúcar: 15 gramos en total, seguido de aditivos, aromatizantes y productos para mejorar la consistencia de la bebida. Según alerta la web de análisis nutricional independiente OpenFoodFacts, también comporta una cantidad de grasas saturadas y sal por encima de lo recomendable, y presenta un riesgo de sobreexposición a los fosfatos de calcio.
Aunque el chocolate se ha considerado como un alimento poco saludable, lo cierto es que el cacao tiene efectos beneficiosos en la salud cardiovascular. Los flavonoides que contiene ayudan a controlar los niveles de colesterol y reducen la presión arterial. El principal problema de los chocolates es, por tanto, la cantidad de azúcar que se les añade que, normalmente, es alta. El chocolate más saludable es el que contiene más cacao y menos azúcar.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) proporciona una lista en la que ha seleccionado 9 chocolates comercializados en supermercados. Les ha concedido una nota teniendo en cuenta el etiquetado, la calidad nutricional y una degustación. En cuanto a este último aspecto, el organismo reclutó a 3 expertos reposteros que han buscado el color, el aroma, la textura y el sabor perfectos.