Llega el verano y con él uno de los imprescindibles: el gazpacho. Esta sopa fría, además de contener ingredientes naturales y saludables muy nutritivos, resulta muy refrescante. Está elaborado a partir de hortalizas de temporada como el tomate, el pimiento y el pepino, por lo que su beneficio es doble: hidrata y se reciben todos los nutrientes naturales.
Aunque el mejor gazpacho que puedes consumir es el casero, prepararlo lleva su tiempo, algo que muchos no se pueden permitir. Es entonces cuando los preparados del supermercado se convierten en una opción.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha realizado un análisis de 41 gazpachos refrigerados diferentes y ha seleccionado los mejores. Para ello ha llevado a cabo un estudio de su etiquetado, un estudio microbiológico en el laboratorio y una degustación por parte de cocineros expertos. Además, ha realizado una valoración nutricional con la información que aparece en el etiquetado.
Tal y como puede comprobarse en el comparador de OCU, no se han detectado problemas de procesado e higiene en ninguno de los gazpachos analizados. Es más, el hecho de someter o no a un producto a un tratamiento térmico, como la pasteurización, no implica diferencias en la calidad final del producto. De hecho, los gazpachos denominados frescos, muchos de los cuales no llevan tratamiento de conservación, no son necesariamente más sabrosos y nutritivos. Eso sí, son de media un 20% más caros y suelen distinguirse por comercializarse en un envase de plástico pet, frente al tradicional brik.