Los frutos secos han ido cobrando importancia dentro de la investigación nutricional. Si bien anteriormente se creía que su base grasa podía perjudicar la salud e incluso potenciar la ganancia de peso, hoy en día se sabe que la clave está en tomarlos sin procesar: los alimentos frescos suelen tener más beneficios que contraindicaciones.
Hoy nos centraremos en el cacahuete, que si bien no es un fruto seco al uso sino una legumbre, su comportamiento nutricional es muy similar a estos. Y, según un reciente estudio publicado a cargo de la Universidad de Australia del Sur, este "falso fruto seco" tendría un gran potencial para la salud: desde ayudar a perder peso hasta controlar mejor la tensión arterial y el azúcar sanguíneo.
Según este estudio, a cargo de Kristina Petersen, profesora asistente de investigación en el Departamento de Ciencias Nutricionales de Texas Tech, y publicado en la revista Nutrients, el consumo de cacahuete ligeramente salado dos veces al día antes de las comidas podría potenciar la pérdida de peso, mejorar la tensión arterial y los niveles de glucosa sanguínea en ayunas.
Para llegar a tal conclusión, Petersen y sus colaboradores realizaron en un ensayo clínico controlado y aleatorizado entre enero y diciembre del pasado año 2021. Se incluyó a dos grupos de adultos australianos con riesgo moderado o alto de diabetes tipo 2.
Ambos grupos recibieron consejos para perder peso, pero con diferencias: el grupo control de 50 adultos recibió instrucciones para no comer frutos secos enteros o en cremas y mantequillas. El grupo de estudio, con 57 voluntarios, sí tomó 35 gramos de cacahuete ligeramente salado y tostado en seco dos veces al día, 30 minutos antes de las comidas.
Tras seis meses de seguimiento, hubo algunas conclusiones importantes:
- Pérdida de peso: ambos grupos perdieron cantidades de peso similares, a pesar de que el grupo que consumió cacahuete llegaba a consumir 400 kcal adicionales a partir de 70 gramos de cacahuetes diarios. En ambos grupos, aún así, se objetivó una pérdida de 6,6-6,7 kg de peso de media.
- Tensión arterial: el grupo que consumó cacahuete redujo más su tensión arterial sistólica (o "tensión alta") respecto al grupo control. Fueron hasta 5 mmHg, lo que se traduce en una reducción de un 10% en el riesgo de sufrir eventos cardiovasculares.
- Niveles de glucosa en sangre: en ambos grupos mejoró el control de la glucosa o azúcar sanguíneo y de la insulina en ayunas, incluyendo la HbA1c o hemoglobina glicosilada, un parámetro de control del azúcar sanguíneo a largo plazo.
Como destaca Petersen, alimentos altos en grasa como los cacahuetes pueden ayudar a perder peso, y de hecho se suelen evitar en las dietas de pérdida de peso por su contenido graso y calórico. Sin embargo, estos alimentos tienen un alto valor saciante, algo que sí puede ser útil en las dietas para perder peso.
Se sabe que los alimentos ricos en proteína y fibra son saciantes y ayudan a reducir la necesidad de comer snacks o simplemente comer en exceso. De hecho, los cacahuetes son una importante fuente de proteína, dado que por cada porción de 30 g hay 7 gramos de proteína, casi 3 gramos de fibra y hasta 19 vitaminas y minerales diferentes.
De hecho, durante el estudio, el grupo que consumía más cacahuetes de forma suplementaria también comía hasta 15 gramos de proteína adicionales gracias a este falso fruto seco.
Así mismo, también destaca el hecho de que, a pesar de estar ligeramente salados, los cacahuetes suplementarios ayudaron a reducir la tensión arterial durante el estudio. Pero habría cierta explicación, según Petersen:
- Los cacahuetes salados son bajos en sodio, al contener solo 90-100 mg por porción.
- Los cacahuetes contienen altos niveles de arginina, un aminoácido que ayuda a dilatar los vasos sanguíneos y reducir la tensión arterial.
- Los cacahuetes son ricos en magnesio, un mineral que también colabora en el control de la tensión arterial.
Finalmente, el estudio también detectó mejoras en los niveles de glucosa. En este caso una posible explicación podría deberse al potencial saciante de los cacahuetes y la pérdida de peso secundaria.