Los crossover están a la orden del día, mezclar personajes, universos e historias tiene muchas ventajas ya que puede suponer tener lo mejor de varios mundos. Sin embargo, en la industria alimenticia es otra historia y en ocasiones, las mezclas no son tan buena idea. El Cruapán lleva varias semanas agotándose en muchos supermercados, desde que se hizo viral en la red social TikTok. Este híbrido entre pan de molde y cruasán, ideado por Bimbo, puede que esté bueno, pero es un producto muy alejado del concepto de saludable.

El pan de cruasán no es un concepto nuevo, ya existían algunas panaderías y obradores, sin embargo, como todo, basta con ponerle un nombre pegadizo y un envase vistoso, además de estar disponible en el súper más cercano, para que se haga viral y todo el mundo quiera probarlo. Este disruptivo pan de molde se vende en bolsas de 380 gramos por alrededor de dos euros y setenta o noventa céntimos, dependiendo del establecimiento.

En primer lugar, echemos un vistazo a sus ingredientes. Harina de trigo, agua, grasa vegetal (palma), mantequilla anhidra (5,6%), agente vegetal (nabina), azúcar, masa madre activa de trigo (5,2%), levadura, sal, emulgentes (E322, E471), almidón de trigo, conservadores (E282, E202), acidulante (E330), masa madre activa de trigo, aroma, extracto de zanahoria, agente de tratamiento de la harina (E300). Puede contener huevo y/o soja y/o frutos de cáscara y/o sulfitos.

En cuanto a su información nutricional, vemos que de cada 100 gramos de producto, tiene 393 Kcal, 23 gramos de grasa, de las cuáles 13 gramos son grasas saturadas, 38 gramos de hidratos de carbono, 7 gramos de azúcar, 7,6 de proteínas y 1,4 de sal.

En primer lugar, este alimento es calóricamente elevado, llegando casi a las 400 kcal por cada 100 gramos. Para hacer una comparativa, de media, una hamburguesa de un establecimiento de comida rápida, por cada 100 gramos cuenta con unas 265 kcal, casi la mitad que el Cruapán. Es cierto que productos como el aceite de oliva o los frutos secos son mucho más calóricos, con 884 y 607 calorías de media, respectivamente. Sin embargo, gracias a las vitaminas y minerales que incluyen, además del tipo de grasa, son alimentos saludables y beneficiosos para el organismo.

"Este pan de molde híbrido contiene muchas calorías para el volumen de comida que supone, ya que este pan tendría que acompañarse de otros ingredientes, por lo que elevaría el porcentaje de grasa corporal. Además, según observo su composición, no contiene los suficientes nutrientes como para que compense la bomba calórica que supone", explica Concepción Martínez, nutricionista-dietista especializada en obesidad.

Ingredientes pobres

Los ingredientes con los que está fabricado este pan de cruasán tampoco son saludables. Por ejemplo, está elaborado con harina de trigo refinada. El problema de este componente es que al trigo se les quita el salvado y el germen durante el proceso de elaboración, que son una importante fuente de proteína (además de vitaminas, minerales y ácidos grasos). Dejando solo el endospermo, que consiste principalmente de almidón. 

El resultado es un alimento menos saciante, que aumenta el índice glucémico durante la digestión y que además cuenta con una mayor cantidad de hidratos de carbono digeribles. Entre los que se encuentra la amilopectina que, durante la digestión, se convierte en azúcar.

En concreto, los carbohidratos de las harinas refinadas se simplifican a gran velocidad en el sistema digestivo. Estos se convierten rápidamente en glucosa, que es absorbida por el torrente sanguíneo en un período muy corto de tiempo, un proceso que podría haber sido ralentizado por la fibra del salvado y el germen, evitando así los picos de azúcar durante la digestión.

Parte de la insulina producida por el cuerpo como reacción al pico de azúcar, según algunas investigaciones, se convierte en grasa, tanto en personas con normopeso como con sobrepeso. "Por se vincula la ingesta de pasta hecha con harinas refinadas con la diabetes tipo 2", señala José Gallardo, dietista-nutricionista. 

También, un estudio, realizado por el Hospital La Paz de Madrid, señala que los alimentos elaborados con harinas refinadas o azúcares refinados son uno de los responsables del aumento de peso corporal y las dificultades metabólicas. Por eso, los especialistas en nutrición recomiendan siempre escoger las variedades integrales. Además, este alimento también contiene azúcares, que tiene un nulo aporte nutricional.

Nutrientes

En cuanto a nutrientes, por cada 100 gramos aporta 7,6 gramos de proteínas, muy pocas si comparamos este alimento con la media de los frutos secos o la soja. Tampoco supone un aporte importante de carbohidratos, mientras que la cantidad de grasa que tiene si se considera elevada, ya que se considera un aporte alto de grasa cuando un alimento tiene 20 o más gramos de grasa por cada 100 de producto. 

Tampoco tiene fibra, que podría ser un componente que pudiera aliviar los picos de azúcar en sangre derivados del consumo de harina refinada. Un hecho que también afecta a la capacidad saciante de Cruapán que es nula, por lo que terminaríamos ingiriendo otros alimentos. "Si no recomiendo consumir pan de molde que no sea integral, menos recomiendo para las dietas de pérdida de peso el Cruapán", sentencia Martínez.