Aunque parezca un sinsentido, hay alimentos con muchas calorías que sin embargo son saludables e, incluso, son recomendados por especialistas para las dietas de pérdida de peso. Lo cierto es que las calorías en sí no son malas para el organismo.
A fin de cuentas, nuestro cuerpo necesita energía para poder realizar todas sus funciones. Lo cierto es que las calorías en sí no son malas para el organismo, ya que este las necesita para funcionar.
"Hay que tener en cuenta que no todas las calorías son iguales. Por eso, a la hora de escoger qué alimentos consumir, lo mejor es optar por los que tengan una carga mayor de nutrientes y que estén mínimamente procesados", señala Concepción Martínez, dietista-nutricionista.
Aguacate
El aguacate, que contiene alrededor de 320-400 calorías, es conocido por ser una excelente fuente de grasas saludables, principalmente grasas monoinsaturadas. Estas son beneficiosas para la salud del corazón, ya que pueden ayudar a reducir los niveles de colesterol LDL (colesterol malo) y aumentar los niveles de colesterol HDL (colesterol bueno). Las grasas saludables también proporcionan energía, ayudan a la absorción de vitaminas liposolubles y contribuyen a la saciedad después de las comidas.
Este alimento es rico en una gran variedad de nutrientes esenciales. Es rico en fibra dietética, que es importante para la salud digestiva y para mantener niveles estables de azúcar en la sangre. Además, es una fuente de vitaminas y minerales, como vitamina K, vitamina E, vitamina C, ácido fólico, potasio y magnesio, entre otros. También contienen antioxidantes, como la vitamina E y carotenoides, que ayudan a proteger las células del daño oxidativo causado por los radicales libres. Estos antioxidantes son importantes para la salud en general y se ha demostrado que tienen propiedades antiinflamatorias y protectoras contra enfermedades crónicas.
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“Gracias a su contenido de grasas saludables y fibra, el aguacate puede ayudar a aumentar la sensación de saciedad y reducir el apetito. Esto puede ser beneficioso para el control del peso, ya que puede ayudar a evitar el consumo excesivo de alimentos y los antojos”, explica Martínez.
Frutos secos
Los frutos secos, con unas 160-200 calorías por onza, son una excelente fuente de grasas saludables, como las grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, incluyendo los ácidos grasos omega-3. Estas grasas son beneficiosas para la salud del corazón, ya que pueden ayudar a reducir los niveles de colesterol LDL (colesterol malo) y disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Este grupo de alimentos también es rico en proteínas vegetales y fibra dietética, lo que lo convierte en una excelente opción para aumentar la saciedad y controlar el apetito. La combinación de proteínas y fibra ayuda a mantener niveles estables de azúcar en la sangre y a evitar los picos de hambre.
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De igual modo, son una buena fuente de vitaminas y minerales. Por ejemplo, las almendras son ricas en vitamina E y magnesio, las nueces contienen ácido fólico y cobre, y las nueces de Brasil son una excelente fuente de selenio. Estos nutrientes desempeñan un papel importante en diversas funciones del cuerpo, como la salud ósea, la función inmunológica y la protección contra el estrés oxidativo. Además, muchos frutos secos contienen antioxidantes, como la vitamina E y los polifenoles, que ayudan a combatir el daño oxidativo en el cuerpo y reducir la inflamación.
Aceite de oliva
El aceite de oliva, que contiene unas 120 calorías por cada cucharada de 15 mililitros, es rico en grasas monoinsaturadas, especialmente ácido oleico, que se ha asociado con beneficios para la salud cardiovascular. Estas grasas pueden ayudar a reducir los niveles de colesterol LDL (colesterol malo) y aumentar los niveles de colesterol HDL (colesterol bueno), lo que favorece la salud del corazón.
El aceite de oliva virgen extra, en particular, es rico en antioxidantes, como la vitamina E y los polifenoles. Estos antioxidantes protegen las células del daño oxidativo causado por los radicales libres y tienen propiedades antiinflamatorias.
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Los polifenoles también se han asociado con beneficios para la salud cerebral y la prevención de enfermedades crónicas, como las enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer. El consumo regular de aceite de oliva se ha asociado con la reducción de la inflamación en el cuerpo. Por lo que su consumo ayuda a prevenir el desarrollo de diversas enfermedades como cardiopatías, diabetes tipo 2, enfermedades neurodegenerativas y iertos tipos de cáncer.
Crema de cacahuete
La crema de cacahuete, que por cada 16 gramos tiene de 90-100 calorías, contiene grasas saludables, incluyendo grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, que son beneficiosas para la salud del corazón. Al igual que en el resto de alimentos de esta lista, estas grasas pueden ayudar a reducir los niveles de colesterol LDL (colesterol malo) y disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Este preparado, siempre que esté realizado a base de cacahuetes y con el menor número de añadidos posibles, es una buena fuente de proteínas vegetales. Las proteínas son esenciales para la construcción y reparación de tejidos, y también juegan un papel en la función hormonal y en la salud del sistema inmunológico. De igual modo contiene fibra dietética, que es importante para la salud digestiva y la regularidad intestinal. Esta fibra también puede ayudar a mantener niveles estables de azúcar en la sangre, promover la saciedad y apoyar la salud cardiovascular.