El arsénico es un metal presente de manera natural en la corteza terrestre. Este se encuentra en diversas concentraciones en el agua y el suelo, debido sobre todo a actividad humana, como la minería y otros procesos industriales. Sin embargo, también tiene un origen natural causado por la actividad volcánica o por la erosión de las rocas. Sea como fuere, este elemento se encuentra también en los campos donde se cultiva el arroz. Este elemento se almacena principalmente en las capas externas del grano, las cuales se retiran para producir arroz blanco. La primera pista para conocer cuál es el arroz que más arsénico contiene.

Existen dos formas de arsénico: inorgánico y orgánico. El inorgánico es conocido por ser más tóxico y es el que se encuentra en mayor concentración en el arroz integral. La razón es que al almacenarse el arsénico principalmente en la parte más exterior del grano de arroz, en la cáscara. y el integral, caracterizado precisamente por mantener partes del arroz como ese exterior, el salvado del grano, es el que mayor concentración de arsénico tiene.

Una serie de estudios han señalado que la exposición prolongada al arsénico inorgánico puede estar asociada con una variedad de problemas de salud, incluyendo enfermedades cardiovasculares, diabetes y cáncer. En la exposición crónica se producen efectos cutáneos, cardiacos, neurológicos y sobre el desarrollo neuronal y el metabolismo de la glucosa. Además, el arsénico inorgánico está clasificado por el IARC como carcinógeno para los humanos (grupo 1). Diferentes estamentos, primero a partir de estudios epidemiológicos de sus efectos cancerígenos y, posteriormente, por evidencias que lo relacionan con el cáncer de pulmón, piel y vejiga, han ido variando y perfilando el valor de seguridad. 

"La exposición al arsénico puede variar según el tipo de arroz, así, en el caso de las variedades de arroz integral, la exposición al arsénico inorgánico puede llegar a ser un 70% superior a la exposición por consumo de variedades blancas", según señala un informe de la Agencia de Seguridad Alimentaria de la Generalitat, publicado en 2021.

En este documento se señalan algunas cantidades de arsénico en función a la variedad de arroz. El arroz integral redondo, el claro ganador por su concentración de esta sustancia, tiene 229 µg/kg de arsénico total, del cual 190 son del inorgánico. Teniendo en cuenta que el valor máximo permitido es de 200 µg/kg, incluso la variedad de arroz integral con más arsénico sería segura para el consumo.

"La concentración de arsénico en el arroz depende sobre todo de la zona geográfica concreta donde se cultive. En este sentido, resulta que el arroz cultivado en España posee mucho menos arsénico que otros arroces, como los estadounidenses o los chinos. De hecho, un estudio llevado a cabo por investigadores de Irlanda del Norte y España concluyó que el arroz español tiene cantidades bajas de arsénico, sobre todo el de las comunidades autónomas de Andalucía, Murcia y Valencia y, además, estas cantidades están muy por debajo de los límites de consumo que marca la EFSA como seguros", señala Mario Sánchez, especialista en Tecnología de los Alimentos conocido por su blog Sefifood, en su libro A tomate pocho no le hinques el diente (Plataforma Actual).

El experto señala que el arroz integral, aún siendo el tipo que mayor concentración de arsénico tiene, no es suficiente motivo como para dejar de consumirlo. Sus beneficios nutricionales son mucho más interesantes que los posibles perjuicios. Una práctica recomendable es lavar el arroz para retirar parte del arsénico. En este caso sí que tiene todo el sentido del mundo someter el alimento a la poderosa acción del grifo de la cocina. Otra estrategia es la cocción con una gran cantidad de agua, similar a como se cocina la pasta, y luego drenar el exceso de agua después de la cocción. 

Aunque advierte sobre el consumo de arroz integral en el caso de los niños. "Lo mejor será que no tomen bebidas ni tortitas de arroz si son menores de seis años y que limiten la ingesta de arroz a cuatro veces por semana. Esta recomendación parte de las autoridades sanitarias de países como Suecia y el Reino Unido como consecuencia de las altas concentraciones de arsénico en los productos elaborados con arroz. Porque además del arroz integral, otros productos que también han hecho sonar la voz de alerta por su concentración de arsénico son los elaborados a base de arroz, como las famosas tortitas", sentencia Sánchez.