Una investigación del Centro Médico Universitario de Ámsterdam, publicada en el número de Navidad de la revista BMJ, desmiente un remedio casero que se ha hecho viral en las últimas semanas en las redes sociales. El supuesto 'truco' afirma que los refrescos de cola ayudarían a despejar el esófago obstruido por un atragantamiento de comida durante las celebraciones navideñas. La realidad es que tomar estas bebidas no ayudaría a evitar el riesgo de asfixia, muy al contrario.

"La médico de urgencias Elise Tiebie, impulsora de este proyecto, vio cómo se propagaba el rumor por Internet, desde páginas web de consejos hasta Wikipedia, pasando por una anécdota en un periódico británico sobre sanitarios que salvaron una vida con refrescos de cola. Incluso he oído a médicos recomendarlo", afirma Arjan Bredenoord, catedrático de Gastroenterología del UMC de Ámsterdam y autor principal del estudio, en declaraciones recogidas por Europa Press.

A veces, un trozo de comida puede atascarse en el esófago después de tragarlo, provocando una dolorosa sensación de presión. En ocasiones, las personas que sufren el incidente ni siquiera pueden tragar saliva. Estas posibilidades de asfixia aumentan cuando se ha producido previamente un estrechamiento del esófago, que puede ser una cicatriz de una inflamación anterior o un estrechamiento por un tumor.

"Esto puede ser muy peligroso. Es importante que la gente reciba el tratamiento adecuado, y por eso nos marcamos el objetivo de comprobar si este truco funciona", añade Bredenoord. En España, la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC) advierte de que los atragantamientos aumentan en Navidad, especialmente en niños menores de cinco años y los mayores de 65, y con las uvas, frutos secos y polvorones como principales responsables.

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En ocasiones, el trozo de comida atascado se termina desprendiendo solo, liberando las vías aéreas, pero en otras no. En ese caso, los pacientes tienen que recurrir a urgencias. Si hay sospechas de que el trozo de comida sigue en el esófago, se hace una endoscopia de urgencia. Se introduce una cámara por la boca hasta el lugar del atasco y luego se extrae el trozo de comida con una redecilla o unas pinzas.

En las historias virales que recopilaron los investigadores, se sugería que los refrescos de cola también podían ayudar a aflojar y hacer pasar el alimento atascado, evitando la endoscopia de urgencia. Bredenoord y su equipo, repartido en cinco hospitales holandeses, investigaron la utilidad y seguridad de estas bebidas a la hora de disolver trozos de comida en el esófago.

Un total de 51 pacientes participaron en el estudio. Mientras esperaban la endoscopia, a la mitad se les dio sorbos de cola en urgencias, y la otra mitad se limitó a esperar. Si los pacientes seguían sin poder tragar saliva, se les realizaba una endoscopia de urgencia y se les extraía mecánicamente el trozo de comida.

Los resultados muestran que la cola no ayudó. Tanto en los pacientes que recibieron el refresco como en los que esperaron sin tomarlo hubo una misma mejora en el 61% de los casos. Por otra parte, no hubo efectos secundarios ni complicaciones por administrar los sorbos de bebida.

"No hubo mejoría al utilizar cola para aflojar la comida atascada en el esófago. A menudo, la comida se desalojaba por sí sola al cabo de un rato y, si no, realizábamos una endoscopia. Esperemos que esto acabe con este mito", concluye Bredenoord.