La legumbre odiada en España que tiene más vitamina C que la naranja y está cargada de proteínas

Los guisantes, conocidos científicamente como Pisum sativum, constituyen una de las legumbres más antiguas cultivadas por el ser humano, con un rico historial que se extiende a través de milenios. Su origen se localiza en regiones de Asia Central y el Medio Oriente, lugares en los que se han descubierto evidencias arqueológicas de su consumo que datan de hace más de 5.000 años. Este legado histórico subraya la importancia de los guisantes en las dietas de antiguas civilizaciones, incluyendo griegos, romanos y egipcios, quienes apreciaban estas legumbres no solo por su versatilidad culinaria sino también por sus notables propiedades nutricionales. 

Nutricionalmente, estas legumbres ofrecen una impresionante gama de beneficios. Cada 100 gramos de guisantes verdes aportan solo 81 calorías, 14 gramos de hidratos de carbono, 5 gramos de proteína, 0,4 gramos de grasa y 5 gramos de fibra. Son una excelente fuente de proteínas de origen vegetal, incluso rivaliza con el huevo en cuanto a la cantidad de este nutriente, lo que las hace especialmente valiosas en dietas vegetarianas y veganas.

Además, son ricas en fibra dietética, vitaminas esenciales como la C, K, y varias del complejo B, y minerales importantes tales como hierro, manganeso y fósforo. Estos componentes las convierten en un alimento integral para promover una salud óptima y prevenir diversas afecciones. Según una revisión publicada en el "Journal of Nutrition", el alto contenido de proteínas vegetales en los guisantes juega un papel crucial en la mejora de la salud cardiovascular y en la gestión del peso corporal, subrayando su papel beneficioso en dietas saludables y equilibradas.

Además de su perfil nutricional, también son una fuente significativa de compuestos antioxidantes, como polifenoles y flavonoides. Estos son esenciales para combatir el estrés oxidativo y reducir el riesgo de enfermedades crónicas, incluido el cáncer. Investigaciones específicas, como las mencionadas en el "American Journal of Epidemiology", destacan la capacidad de los antioxidantes presentes en los guisantes para neutralizar los radicales libres, contribuyendo así a una mejor salud celular y general. Este efecto proporciona una capa adicional de protección contra el daño molecular, promoviendo la longevidad y una salud óptima.

El alto contenido de fibra que tienen también juega un papel vital en la promoción de un sistema digestivo saludable. Esta fibra dietética facilita la prevención del estreñimiento y el mantenimiento de una microbiota intestinal saludable, aspectos esenciales para la absorción eficiente de nutrientes y la prevención de enfermedades digestivas. Un artículo en el "Journal of Nutrition" resalta cómo la fibra de los guisantes puede mejorar la digestión y la absorción de nutrientes, además de ser crucial en la regulación de los niveles de azúcar en la sangre, subrayando la importancia de incluirlos regularmente en la dieta.

También desempeñan un papel crucial en la prevención y manejo de la diabetes tipo 2 gracias a su bajo índice glucémico y su capacidad para regular los niveles de azúcar en la sangre. Estudios como los publicados en el "Diabetes Care journal” demuestran que el consumo regular de legumbres como los guisantes, mejora el control glucémico y reduce significativamente el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Esta propiedad es particularmente valiosa en el contexto de una epidemia global de diabetes, ofreciendo una estrategia dietética efectiva para mitigar el riesgo.

La riqueza de estas legumbres en vitaminas del complejo B los hace esenciales para el mantenimiento de una buena salud mental y del sistema nervioso. Por ejemplo, la vitamina B1 (tiamina) es crucial para la producción de energía y el funcionamiento óptimo del cerebro, como se discute en investigaciones publicadas en el "Journal of Neurochemistry". La presencia de estas vitaminas subraya la importancia de los guisantes en la dieta para el soporte neurológico y cognitivo.

El consumo de guisantes también está asociado con la mejora de la salud ósea, gracias a su contenido de vitamina K y manganeso, nutrientes que juegan un papel esencial en la formación ósea y la prevención de enfermedades como la osteoporosis. Así lo revela el "Journal of Bone and Mineral Research" que destacan la importancia de la vitamina K en el mantenimiento de una estructura ósea saludable, lo que refleja el valor de los guisantes en la promoción de una salud ósea robusta.

Para aquellos interesados en la pérdida de peso, incluso pueden ofrecer beneficios específicos debido a su alto contenido de proteínas y fibra, que contribuyen a la sensación de saciedad. Esto puede ayudar a controlar el apetito y reducir la ingesta total de calorías, como se sugiere en investigaciones del "American Journal of Clinical Nutrition". La capacidad de los guisantes para promover la saciedad sin aportar un exceso de calorías los convierte en un excelente complemento para dietas dirigidas a la pérdida de peso y el manejo del apetito.

En el ámbito de la salud cardiovascular, los guisantes tienen un papel destacado gracias a su contenido de saponinas y esteroles vegetales, que pueden contribuir a la reducción de los niveles de colesterol LDL. De hecho, una revisión publicada en el "Journal of Nutrition" respalda la idea de que las legumbres, incluidos los guisantes, son beneficiosas para la salud del corazón, subrayando su valor en dietas orientadas a la prevención de enfermedades cardíacas.

La inclusión de guisantes en la dieta también es una estrategia efectiva para aumentar la ingesta de hierro, un mineral crucial para el transporte de oxígeno y la prevención de la anemia. La combinación de la vitamina C, abundante en este alimento, junto a fuentes de hierro puede mejorar significativamente la absorción de este mineral, como se reporta en el "International Journal of Molecular Sciences". Este aspecto es particularmente importante para individuos con riesgo de deficiencia de hierro, ofreciendo una solución nutricional valiosa.