Los suplementos alimentarios no tienen capacidad para 'quemar grasa' por sí solos, explica Belén Fontán Calvo, especialista en Dietética y Nutrición del Hospital Universitario Ruber Juan Bravo, entrevistada por Europa Press. Pero eso no significa que no tengan efectos: cuando se obtiene el déficit calórico mediante una dieta hipocalórica y ejercicio, algunos alimentos "pueden ayudar" a 'quemar' las grasas.
"La base para la quema de grasa y para la producción de ese déficit calórico reside en la alimentación, el entrenamiento, la actividad física y el descanso", explica. El acompañamiento de los suplementos alimentarios contribuirá mediante una serie de factores: algunos producen saciedad y reducen el apetito, otros aumentan el gasto calórico, y un tercer tipo permite que la absorción de la grasa alimentaria disminuya.
Entre estos alimentos destacan algunos cuyos efectos se han demostrado, tales como la cafeína, y el té verde, mientras que otros requieren de más estudios para conocer si realmente contribuyen a la pérdida de grasas. El primero de ellos es la cafeína. Cuando interviene en sistemas energéticos incrementa el metabolismo basal, lo que se traduce un mayor consumo calórico diario y permite más flexibilidad para perder grasa.
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"Por lo tanto, si tienes un entrenamiento bien pautado, y estás buscando mejorar tu condición física o reducir tu masa grasa, la cafeína puede ser una buena aliada", asegura la experta. "Siempre y cuando la toleres bien y tu alimentación, ejercicio y descanso sean adecuados a tu objetivo".
Otro de estos suplementos es el té verde. Además de cafeína, contiene catequinas, que ayudan a un mejor control de la glucosa plasmática, mejora la oxidación de las grasas e incrementa la saciedad, mejorando además el metabolismo de los pacientes que están sometidos a dietas hipocalóricas.
"Si lo incluimos en un estilo de vida saludable que tenga nuestros 3 pilares fundamentales para la pérdida de grasa, puede ser un buen aliado", asegura Fontán. En cuanto a la L-carnitina, por su mecanismo de acción, favorece la oxidación de las grasas.
Asimismo, el ácido hidroxicítrico, el principal compuesto de la garcinia cambogia -una fruta de origen asiático- favorece el uso de las grasas como fuente de energía y produce mayor saciedad, limitando la ingesta calórica. Por último, la experta también ha hablado del ácido linoleico, que se trata de una grasa trans, presente sobre todo en la grasa proveniente de los lácteos derivados de las vacas, aunque también se puede encontrar en otros productos lácteos y en la grasa cárnica.
La nutricionista menciona la espirulina, que se trata de un alga de agua dulce a la que se atribuye efecto saciante y un mejor control metabólico. Sin embargo, sus efectos aún están en estudio. Por otro lado, la yohimbina se extrae de la corteza de árboles procedentes de África y ha resultado útil en la pérdida de grasa, ya que interviene en la oxidación de las grasas y actúa como un agente termogénico.
No obstante, se han observado también efectos a nivel de la tensión arterial, incrementándola, por lo que la administración de este suplemento debería estar controlada por un especialista. Dada su controversia, advierte Fontán, en algunos países está prohibida.